Aunque Marcos Pérez Jiménez fue el mandatario que transformó realmente a Venezuela, mediante la ejecución de las más importantes obras y servicios, su férrea dictadura y el empeño de aferrarse al poder lo perjudicaron totalmente.
Las trampas electorales que hizo con el fin de mantenerse en Miraflores le salieron mal y fortaleció el rechazo , que tenía en todo el país, sobre todo porque no había libertades públicas y los ciudadanos vivían atemorizados ante un gobierno que nada le importaba detener, encarcelar, torturar y asesinar a quienes mostraran desacuerdo con el perezjimenismo.
Este militar que fue el primero en la academia peruana donde se formó desconoció aquellas sabias palabras que el mariscal Antonio José de Sucre le dirigiera a Simón Bolívar, el 6 de juio de 1826.
Tales expresiones, contenidas en una carta, fueron; “tengo gran miedo a los congresos constituyentes, que no teniendo reglas ni ley alguna, hacen lo que les da la gana”.
Y precisamente para hacer eso, en 1952, Pérez Jiménez convocó unas elecciones para llevar a cabo una Asamlea Nacional Constituyente.
Inhabilitó a Acción Democrática, que era el partido mayoritario, y al Partido Comunista.
Como quedaron en la oposición Unión Republicana Democrática y Copei, éstos concurrieron a esos comicios.
De calle ganó URD
Pérez Jiménez que era apoyado por el Frente Electoral Independiente, un parapeto que había inventado, perdió inevitablemente.
El dictador expulsó del país a Jóvito Villalba, máximo dirigente de :URD y prohibió informar sobre lo que había ocurrido en las elecciones
Pero fue más allá: destituyó a los miembros del Consejo Supremo Electoral.
Y el 2 de diciembre de ese año anunció su victoria, que había sido, por supuesto, un fraude.
Para mantenerse en el poder convocó un plebiscito para el 15 de diciembre de 1957, a través del cual pidió el Si para continuar mandando y, naturalmente, determinó que el No era lo contrario.
El aparato electoral lo dio ganador con 2 millones 374 mil 790 votos, informando que el no apenas había recibido 354 mil 182 sufragios.
Pero, la oposición había llamado a la abstención.
Es por eso que cuando el 20 de diciembre se hace el anuncio sobre el supuesto triunfo de Pérez Jiménez arrecian las movilizaciones para derrocarlo.
Y ya sabemos que el dictador tuvo que salir huyendo en la madrugada del 23 de enero porque su dictadura se había desplomado estruendosamente.