China detuvo a dos Canadienses poco después, luego de una medida donde analistas en un intento de presionar en Ottawa para que deje en libertad a Meng. Beijing condenó además a Robert Schellenberg a la pena de muerte este pasado lunes 14 de enero en una operación repetida de su juicio por narcotráfico.
La detención de Meng durante una escalada en el aeropuerto de Vancouver el pasado 1 de diciembre provocó un enfrentamiento diplomático que ha ido en aumento. Meng es la directora financiera de Huawei y la hija de su fundador. Está buscada en Estados Unidos en una relación con una investigación sobre supuestas violaciones de las respuestas a Irán.
China no está de acuerdo con sus palabras este jueves 17 de enero para acusar a la Ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, que dijo que la atención de los ciudadanos canadienses por parte de Beijing es una amenaza para todos los países.
Canadá sí que representa una amenaza para China al detener a uno de sus ciudadanos «sin motivos», así como la vocera refiriéndose al arresto de la ejecutiva del gigante de las telecomunicaciones chino Huawei, Meng Wanzhou, un requerimiento de Estados Unidos.
«Es comprensible que Canadá sea un poco preocupado, pero esperamos que podamos hablar libremente sin pensar porque su reputación y su imagen pueden ser muy dañadas por este tipo de comportamientos», declaró Hua. «Y estas declaraciones tampoco ayudan a zanjar el tema».