Si la violencia es una “sensación” como aseguran los simpatizantes de Nicolás Maduro, ¿Por qué las autoridades gubernamentales y altos funcionarios de Lara utilizan escoltas? Esa es la gran pregunta que existe en entre los larense al ver los hechos sangrientos que se ejecutan en la ciudad crepuscular.
De las 936 muertes violentas que se registraron en Lara durante el 2018, el 69% se ejecutaron en el municipio Iribarren, llevándolo a convertirse en sexta jurisdicción más violenta de Venezuela.
El sociólogo y Coordinador del Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV-Lara), Carlos Meléndez, explicó que de las 2.5 muertes violentas al día que ocurrieron en el estado Lara, en Iribarren se registraron 1.7.
“El municipio Iribarren continúa siendo el sexto municipio que concentra más muertes violentas en el país. De las 2.5 muertes violentas al día que ocurrieron en el estado, en Iribarren registramos 1.7. En el municipio capital ocurre el 69% de los asesinatos contabilizados. Los sectores populares de Barquisimeto son los más perjudicados; son los pobres, hombres y jóvenes quienes siguen muriendo de forma violenta en nuestra sociedad”, explicó el sociólogo.
El especialista señaló que “los municipios Jiménez y Andrés Eloy Blanco presentaron una disminución del 100%, mientras que Iribarren, el municipio con mayor concentración de muertes violentas en la entidad, aumentó tres (03) puntos porcentuales en relación al año pasado”, culminando con una tasa de 63 por cada 100.000 habitantes.
Aseguró que las parroquias más violenta se encuentra Juan de Villegas, apodada por los funcionarios de seguridad como la “cuna de forajidos”, seguida de Concepción y Unión.
