Aunque las manifestaciones registradas este año en el país, todavía no alcanzan los puntos álgidos asociados con el ciclo de protestas de mediados de 2017, son significativamente más intensas que durante la segunda mitad del año pasado. “Sin embargo, la data sugiere que la modalidad y el enfoque de las protestas ha cambiado.
Así lo refleja Torino Economics en su informe semanal, donde analizó el comportamiento de las protestas sociales en 2018, tomando como base la data recopilada por organizaciones no gubernamentales.
Destaca la firma que las protestas a principios de 2017 estaban enfocadas en exigencias políticas nacionales, mientras que las de 2018 han estado más centradas en conflictos económicos, sociales y ambientales específicos”, indica la firma. De acuerdo con la
data, las protestas son cada vez menos motivadas por reclamos políticos: 90,8% de las manifestaciones registradas por el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) entre enero y octubre de 2018 estaban asociadas con conflictos no políticos.
Otra organización llamada El Termómetro de la Calle (ETC) muestra resultados similares: la proporción de protestas no políticas subió de 19% en 2017 a 91,4% en 2018. ETC además
revela que más de un tercio de las demandas en lo que va de 2018 (38,3%) son de carácter laboral, seguido por problemas en los servicios públicos (21,4%).
El análisis de Torino Economics también revela que, pese que los estados con mayor población concentran la mayor cantidad de protestas, en términos de densidad, los estados con mayor nivel de conflictividad son Mérida, Trujillo y Táchira, en la frontera con
Colombia.
Para la firma, a pesar de que existe poca coordinación entre las protestas, lo cual limita su capacidad para generar cambios políticos, cabe recordar que los cambios de régimen en sociedades autoritarias muchas veces son disparadas por eventos que se originan en protestas descentralizadas, enfocadas en reclamos sociales específicos. Este tipo de regímenes concentran tantos esfuerzos en la represión de los movimientos opositores que
tienden a hacerse vulnerables a protestas espontáneas y descentralizadas emanadas de la comunidad, señala Torino Economics.
