Presentimientos y Comprensión: Puede que nuestro existir llegara a convertirse, por esta vía, en un inmenso reglaje de presentimientos altos que nos llevaría a la búsqueda esperanzada de una democracia prudente, sobria, viva y entregada, que ahora echamos de menos en nuestras vidas.Comprenderíamos, también, que ese alguien a quien llamamos Dios, porque de alguna manera tenemos que llamarlo, y siempre nos quedaremos cortos:
- No es el Ser exigente, que nos rebaja a servidumbre vil y nos quiere sometidos a ciega sumisión, sino común “Padre Nuestro” que mantiene su mesa puesta y nos guarda, para cuando queramos volver a casa, un sitio que sólo puede ser el nuestro;
- No es un Dios recurso-de-autoayuda,sino el magnífico administrador de acicates que estimulan, impulsan, sacuden la modorra, y lanzan un reto al que hay que responder;
- No es el Dios-disminuido, que tiene a la razón por enemiga, sino el inteligente moderador que convida a ejercitarla en ese interminable simposio que es la vigilancia y el cultivo de la propia conciencia, y en la búsqueda de los dones del Espíritu Santo: el conocimiento y la sabiduría.
Ojalá, también, entenderíamos, que el barrunto que nos hizo vislumbrar en un momento dado de nuestras vidas que Dios es bueno, pudiera convertirse en una convicción torrencial capaz de hacernos comprender que es posible hacer el bien, mucho más allá de las virtudes simplemente prácticas y convenientes, y que cuando la Escritura se refiere a “servir a Dios en su presencia”, lo que hace es:
- Invitarnos a hacer de nuestra actividad, una sucesión de actos conscientes, lúcidos,en los cuales vibre pleno el intelecto, plena la decisión de la voluntad, plenos los sentidos, pleno y abierto el corazón, plena la atención a las personas, cosas y acontecimientos que nos rodean,
- Con la fuerza creadora del “hágase en mí, Señor Jesús, tu palabra” y, de un estoy dispuesto a ser mejor y hacer mejores a los que me rodean.
Personajes nefastos: Veo de repente, desde allá arriba, como si el paisaje perdiera de improviso su lejanía y su profundidad y ocupara todo el ámbito de visión, los alborotados personajes de una mascarada: la Inquietud, la Agitación y el Apresuramiento inútil, la Ambición compulsiva,el Impulso irresistible de bailar al son que toque el poder;la Satisfacción,que se solaza en el dispendio y la corrupción; el Orgullo de la Nomenklatura, que se pavonea en las ventajas de posición y clase; la Ufanía de lo propio y vernáculo, que se erige en jactanciosa forma de exclusión para los que no piensan como el que ejerce el poder, y el Arrastramiento indigno de los que aplauden el odio, el lenguaje violento, la discriminación, la imposición del miedo y el venderse al poder.
Nueva Visión: Desde la altura en que estoy, acaso han comenzado a brillar constelaciones nuevas, percibo fechas que me llevan al inicio del despertar del sueño: el 26 de septiembre de 2010, que inició la esperanza, octubre y diciembre de 2012 y en julio 2017, con el pueblo soberano exigiendo la sacra y vibrante emoción espiritual venezolana de:
- Reconstruir a Venezuela y a los venezolanos todos, en libertad y pluralismo, no mirando para atrás, sino construyendo como bicentenarios una democracia auténtica;
- Crecer como ciudadanos, igual que desde hace dos milenios, silente, brillante, misteriosamente nació Jesús de Nazaret, para darnos paz y amor de forma que en las ciudadelas de los heridos corazones venezolanos encendidos, eclosionen en impulsos y acciones de compartir, de perdonar, de confiar, de amar, de crear y de creer, que el “BIEN COMUN” existe y es posible darle cumplimiento para todos, pese a las violentas tempestades revolucionarias de mentiras y fracasos, y
- Por encima de los montones de estiércol que se ponen a nuestro alcance, al parecer, con fines de degustación, en cadenas presidenciales y en programas hegemónicos, está la conciencia y el voto de los ciudadanos que quieren a Venezuela por su forma de actuar, nos den una alegría para que “Venezuela sea: Tierra de Gracia. Paraíso que deseamos”, con el esfuerzo de todos.
PRÓXIMO DOMINGO: Continuaré con este sueño en base a: Nueva Democracia – Espiritualidad que necesitamos – Acciones a realizar.