El diputado William Dávila, presidente de la Comisión Internacional de la Asamblea Nacional (AN), catalogó como exitoso el resultado de la misión oficial del Parlasur (Parlamento del Mercosur) que se trasladó los días 5, 6 y 7 de noviembre al estado de Roraima, Brasil, para recabar información y sumar esfuerzos de cooperación en cuanto a la atención del migrante venezolano en esa zona fronteriza.
Destacó el parlamentario que a Brasil han llegado más de 80 mil venezolanos solicitando refugio, por lo cual representantes de Argentina, Paraguay Uruguay Brasil y Venezuela se hicieron presentes, entre otros aspectos, “para impedir que el problema se invisibilice a pesar de la negación de la cancillería venezolana que no acepta su existencia”.
La representación pudo observar problemas con el suministro de agua potable y carencia de medicinas para contener enfermedades, así como la necesidad de provisiones para garantizar la seguridad alimentaria de los más de 2 mil 500 connacionales refugiados en ese estado fronterizo. “Tienen problemas de carácter sanitario y necesitan atención psicológica”, afirmó.
Durante un punto de información en la sesión de este martes, Dávila manifestó que de acuerdo a informaciones de organismos internacionales en los últimos 18 meses más de 3 millones de venezolanos han solicitado refugio en varios países.
Resaltó el recientemente problema ocurrido en agosto en el municipio de Paracaima, del estado de Roraima, donde más de 2.000 venezolanos fueron agredidos, en razón de ello Parlasur aprobó esta misión que próximamente se trasladará también al Norte de Santander.
Explicó que hay más de 6 mil personas entre refugiados y migrantes, mientras que más 2 mil 500 han sido reubicadas en el interior Brasil, en un esfuerzo cooperación de las Fuerzas Armadas y las autoridades municipales y legislativas de ese país.
Otro de los problemas del que tuvo conocimiento la misión, fue del nuevo fenómeno de la violencia en la diáspora del Delta venezolano, la misma que está presente en el arco minero penetrado por la guerrillera y con su población desplazada por la compra de sus tierras a precios de gallina flaca con la anuencia de las autoridades venezolanas.
Señaló Dávila que a los indígenas les han permitido mantener sus tradiciones y se estableció el registro del currículo para acceder a empleo y a la interiorización. “Un inmigrante bien tratado es un aporte al país donde llegan y representará un incremento en su PIB”, dijo.
Resaltó el aporte de la delegación del Parlasur que por primera vez se está trasladando a la frontera, tras la iniciativa de la representación venezolana que lo propuso hace mes y medio donde “fue aprobado por unanimidad y estamos actuando, realizando un esfuerzo concreto”, precisó.
Comentó el legislador que observaron de cerca la realidad de lo que sucede en Boa Vista y Pacaraima donde hay cerca de 6 mil venezolanos y siguen pasando aproximadamente 1 mil 500 personas diariamente, según las autoridades de la zona.
“La realidad es que hay una migración venezolana forzosa que solicita regularización en su permanencia, por lo que gente sociedad civil, ONG´s y empresarios estuvieron viendo cómo ubican laboralmente a estos miles de inmigrantes”, indicó Dávila.
Finalmente el parlamentario cuestionó que por culpa del régimen centenares de venezolanos se han visto obligados a huir de la catástrofe. “Profesionales, expertos en oficios y gente de toda especialidad, con experiencia y capacitación, están huyendo y tristemente serán los países que los reciben quienes se beneficiarán cuando pudieran estar siendo productivos en su tierra, Venezuela”, puntualizó.