Maná se convirtió en la primera agrupación honrada como Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación el miércoles, cuando sus cuatro integrantes fueron distinguidos en una gala-concierto tachonada de estrellas por sus logros creativos y esfuerzos filantrópicos.
El vocalista Fher Olvera, el baterista Alex González, el guitarrista Sergio Vallín y el bajista Juan Calleros recibieron un trofeo de cristal frente a artistas, líderes de la industria musical y otros en el Centro de Eventos Mandalay Bay en Las Vegas en la víspera de los Latin Grammy.
“Maná es una banda que ha dado todo siempre, todo el corazón, toda el alma”, dijo Olvera en el escenario antes de recordar los humildes inicios de la banda y los años que pasaron durmiendo en una van. “Estuvimos trabajando mucho, mucho, mucho hasta alcanzar lo que hemos ido sembrando y cosechando. Nunca pensamos por ejemplo que íbamos a tocar en Israel o que íbamos a estar tocando hace dos años en la Casa Blanca”.
Más de una docena de artistas latinos agasajaron a Maná interpretando sus grandes éxitos. Gilberto Santa Rosa cantó una versión de “Bendita tu luz” a ritmo de salsa, Pablo Alborán interpretó una versión pop de “Rayando el sol” y Pepe Aguilar acompañó al Mariachi Sol de México de José Hernández para “Mariposa traicionera”.
La Academia le concedió a Maná el honor por sus extraordinarios logros creativos y contribuciones filantrópicas a la comunidad latina, así como por su apoyo constante y dedicado a la preservación y protección del medio ambiente y de los derechos humanos.
A lo largo de las últimas tres décadas, la banda ha usado su voz para llamar la atención sobre problemas ambientales, sociales, políticos y humanitarios en todo el mundo a través de sus canciones, sus conciertos y, en los últimos años, sus redes sociales. También ha promovido el voto latino en Estados Unidos y América Latina y denunciado lo que considera injusticias sociales en países como Venezuela, Nicaragua o Bolivia.
El lunes, Olvera visitó un refugio temporal en el estado mexicano de Jalisco donde miembros de una caravana de centroamericanos que intentaban llegar a la frontera estadounidense descansaban. Les ofreció unas palabras de aliento y les cantó “Rayando el sol” y “El muelle de San Blas”.
“Fui a verlos. Hemos estado apoyando a los inmigrantes aquí en Estados Unidos por más de 20 años”, dijo Olvera en la alfombra roja, en inglés. “Al final del día, somos hermanos, somos seres humanos… No deberíamos tenerles miedo… Yo les dije que se cuidaran. Vi bebés, vi niños. Fue triste, pero ellos tienen mucha esperanza”.
González agregó que estas personas no hubiesen emigrado “si no hubiera tanta corrupción en los países de donde vienen”.
“Nadie quiere dejar su país”, dijo el baterista en la alfombra roja. “Estas personas están escapando de muchas situaciones muy drásticas. Esto es una crisis humanitaria, pero tenemos que ayudar a estas personas de una manera o de otra. Sí, es ilegal entrar a un país, pero como dice Fher, hermanos y hermanas, crisis humanitaria, tenemos que ayudarlos”.