Boca Juniors y River Plate disputaron el partido de ida de la final de la Copa Libertadores, el cual culminó 2-2, cumpliendo ampliamente las expectativas de lo que se esperaba en este ‘súper clásico’ del fútbol mundial.
El primer golpe lo dio el conjunto local, cuando Ramón Ábila marcara al minuto 34, luego de un rebote dejado por Armani, haciendo que la grada de La Bombonera explotara de la emoción.
Pero rápidamente River Plate igualó el compromiso, cuando Lucas Pratto aprovechó un pase entre líneas del ‘pity’ Martínez, definiendo de manera cruzada ante el intento de atajar el balón de parte de Rossi.
Justo cuando iba a terminar el primer tiempo, Darío Benedetto, quien había ingresado al juego al minuto 27, después de una lesión de Pavón, aprovechó un tiro libre del conjunto ‘Xeneize’, y marcó un gran tanto de cabeza, donde el portero Armani no pudo hacer nada.
La final siguió transcurriendo con múltiples emociones, con mucha garra y energía como acostumbra el fútbol argentino, y sobre todo, el ‘súper clásico’ de Buenos Aires.
Luego, llegaría nuevamente el tanto del empate para River Plate, a través de un autogol de Carlos Izquierdoz, quien intentó despejar un tiro libre del equipo ‘Millonario’, pero sólo pudo rozar y dirigirla a su propio arco.
La gran final de la Copa Libertadores se decidirá el sábado 24 de noviembre, en el Estadio Monumental, donde River Plate intentará coronarse con el título internacional en su condición de local, aprovechando esa mínima ventaja que obtuvieron en su visita a La Bombonera.