Juan José Levy, un empresario argentino dueño de Laboratorios Esme, es señalado por supuestamente haber blanqueado 1.400 millones de dólares a través de un fideicomiso binacional impulsado por el kirchnerismo y el chavismo y que estaría vinculado a la “diplomacia paralela”.
Levy habría acumulado negocios con Venezuela por un total de 550 millones de dólares a través de diversas empresas que le vendía al Gobierno chavista múltiples productos, desde detergentes hasta televisores a través del referido fideicomiso.
El empresario forjó durante ese tiempo relaciones con José Maria Olazagasti, la mano derecha de Julio De Vido en el ministerio de planificación y quien sería el hombre detrás de la llamada “diplomacia paralela” con Hugo Chávéz y Nicolás Maduro.