Para solicitar el envío de una comisión al país que investigue las condiciones de reclusión de los presos políticos, para evitar muertes como la del concejal Fernando Albán, bajo la custodia del propio Estado, acudieron este jueves a la sede del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en Caracas, representantes del Proyecto Libertad y familiares de presos políticos. Lilian Tintori, activista de derechos humanos y esposa del líder político Leopoldo López, informó que fue entregado ante el PNUD un documento donde, exigimos la libertad plena de todos los presos políticos que son 400, de los cuales 160 son militares. Solicitamos la visita de la alta comisionada de derechos humanos de las Naciones Unidas. Es momento que venga a Venezuela. ¡Basta de pronunciamientos, deben venir para acá! La vida de los venezolanos está en riesgo”, advierte Tintori, quien considera que la situación de Fernando Albán es la continuidad de otras muertes ocurridas en extrañas circunstancias, en centros penitenciarios del Gobierno.
“Mañana podemos amanecer con otro preso político muerto. La dictadura los mata. Fernando Albán, preso político, está muerto. Rodolfo González, desde el Helicoide, salió muerto. El concejal Carlos García, también de Primero Justicia en el año 2017, terminó muerto por no darles atención adecuada cuando están enfermos, por no dejarles tomar sol”, denunció Tintori. Junto a ella Renzo Prieto, diputado de la Asamblea Nacional -quien también conoció la prisión en el régimen de Nicolás Maduro-, instó a las Naciones Unidas a hacerse presente en Venezuela. Asimismo, confirmó el tipo de torturas que ocurren contra los privados de libertad.
“Solicitamos que vengan al país, que constaten esta situación para que no se repita. A los presos políticos los ahogan en agua, los asfixian con una bolsa, los cuelgan de rejas estando esposados o como pasó con un Polichacao, a quien vi esposado de manos y pies, tapados sus ojos con periódico, sin derecho a tomar agua, ni a comer ni ir al baño durante dos o tres días en ese lugar, en esas condiciones, en la misma posición. ¡Díganme si eso no es tortura, si no es un trato cruel, inhumano y degradante!”, expresó el parlamentario.
Yamileh Zorrilla, esposa del funcionario de Polichacao Fred Mavares, también vocera de los familiares de los presos políticos, solicitó la intervención del organismo internacional para que “cese la tortura, pues vemos cómo han muerto tantas personas en manos del Gobierno y aquí no, pasa nada. Ayer le tocó a ellos, hoy nos puede tocar a nosotros. Fred tiene dos años y cuatro meses preso y con él todos nosotros, sus familiares. Él está muy deprimido, muy flaco, desencajado, mentalmente muy mal, esperando sum libertad. Exigimos la libertad plena de todos los presos políticos, pues tenemos miedo, mucho miedo. No queremos que ocurra otra muerte como la del concejal Albán”.
Familiares de los presos políticos y la representación de excarcelados, luego de entregar la solicitud al PNUD, colocaron en las paredes de la sede del ente internacional los nombres de los 400 hombres y mujeres que hoy se encuentran tras las rejas por pensar distinto y querer vivir en democracia, revela la información.
