La policía colombiana clausuró un pequeño museo improvisado que exhibía detalles sobre la vida del narcotraficante Pablo Escobar, argumentando que los administradores del edificio carecen de una licencia turística, anunciaron el jueves las autoridades.
Los agentes allanaron las instalaciones la víspera mientras las visitaban siete turistas, añadieron. Ahora las puertas de cristal tienen letreros blancos que indican que están clausuradas.
El sitio era administrado por el hermano de Pablo Escobar, Roberto, de 71 años, y era popular en los así llamados “narcotours” en la ciudad de Medellín. En esos recorridos se lleva a los visitantes a varios lugares relacionados con la vida del fallecido narcotraficante, incluida su tumba y una vivienda en la que sus enemigos detonaron explosivos.
Federico Gutiérrez, alcalde de Medellín, dice que ese tipo de tours son legales, pero a él le desagradan porque promueven la “cultura de la mafia”.