José Pekerman besó la bandera de Colombia y con ella se enjugó las lágrimas, tras recibirla el lunes de manos del presidente Iván Duque, en un emotivo acto de reconocimiento.
Trece días después de que Pekerman anunció que no seguiría como técnico de la selección colombiana, el homenaje en la Casa de Nariño, residencia oficial de Duque, fue también un acto de despedida.
«Este es un capítulo que se cierra, pero es una historia que siempre va a continuar… No tengo duda que va a ser así. Con los futbolistas y el pueblo colombiano hemos construido un gran equipo y estuvimos juntos. El hincha sabe que cuando ganamos, ganamos todos, y cuando perdemos, también. Hemos logrado unión. Los llevamos a todos en el corazón», indicó Pekerman.
El estratega argentino llevó a Colombia a los cuartos de final en 2014, el mejor papel de la selección dentro de un Mundial en la historia. En la Copa del Mundo realizada en el presente año en Rusia, no pudo repetir la proeza, y Colombia sucumbió por penales ante Inglaterra en los octavos de final.
Culminó así una gestión de seis años y medio.
«Usted es más que un técnico… Técnicos hay muchos pero aquel que entra en el alma del jugador y que motiva más que intimidar es lo que se necesita», destacó Duque, quien además de entregarle la bandera, le dio al técnico una placa conmemorativa en la que agradeció su contribución al país.
El mandatario afirmó que había llamado por teléfono al entrenador luego que confirmó públicamente que no seguiría en el banquillo de Colombia.
«Usted logró que la selección Colombia se uniera sin individualismos, donde cada uno de los jugadores tiene un espíritu colectivo y eso nos permitió no solamente destellar en Brasil, sino alcanzar el sueño de estar en Rusia, jugar unos partidos monumentales», concluyó.
No fue la primera vez que Pekerman recibió elogios de un presidente de Colombia. Fue condecorado por Juan Manuel Santos con la Cruz de Boyacá en la ceremonia de entrega de la bandera a Radamel Falcao, capitán de la selección nacional que compitió en Rusia.
En dos ocasiones, Santos le ofreció la ciudadanía colombiana al técnico, a quien se atribuye haber devuelto a la selección nacional de Colombia la competitividad internacional que se había perdido.
«Era un desafío grandísimo, con la eliminatoria comenzada, con muchos años (16) sin ir a un Mundial, con una grieta en el fútbol. Vine con objetivos claros de poner a Colombia otra vez en el fútbol del mundo… obvio que uno quiere siempre un poco más», recordó Pekerman, quien estuvo acompañado en la ceremonia por su esposa Matilde.
El entrenador confió en que los éxitos de la selección colombiana no terminen con su partida.
«Quiero dejarles la sensación de que Colombia va por más… En esta etapa estoy seguro de que Colombia va a ser cada vez más, llegaremos a los títulos cuando se nos dé, pero estamos a las puertas», dijo Pekerman, dirigiéndose a los hinchas con voz pausaday en medio de una cerrada ovación. «Podemos ser adversarios de riesgo para las grandes potencias».
Arturo Reyes ha sido nombrado sucesor provisional de Pekerman.