La UEFA presentó el lunes una acusación contra Polonia por los actos racistas mostrados por sus aficionados en un partido de la Liga de Naciones, mientras que la República Checa y Ucrania enfrentan cargos por disturbios en las tribunas.
Estos son los primeros casos disciplinarios que involucran a la más reciente competencia de selecciones europeas. La UEFA no especificó cuáles fueron las acciones presuntamente realizadas por hinchas polacos durante el empate del viernes por 1-1 frente a Italia, pero el organismo rector del fútbol de Europa indicó que el caso sería atendido el próximo 21 de septiembre.
El partido entre Italia y Polonia se llevó a cabo en el estadio Dall’Ara de la ciudad italiana de Bolonia.
República Checa y Ucrania, por su parte, deberán responder por el ingreso de aficionados a la cancha en su duelo del jueves, mientras que los seguidores ucranianos también fueron acusados de generar disturbios, arrojar objetos y causar daños al estadio. Ucrania ganó el encuentro 2-1.
La selección checa además enfrenta una acusación por el retraso del inicio del partido, causado por un problema con los reflectores del estadio. Todas las acusaciones relacionadas con ese juego serán abordadas el 27 de septiembre.