El presidente de la Asamblea Nacional, diputado por el Estado Zulia, Omar Barboza fue recibido este sábado 8 de septiembre por el Papa Francisco, a quien le agradeció su preocupación permanente por la situación del pueblo de Venezuela.
Barboza destacó el apoyo que su Santidad ha dado a la iglesia venezolana para continuar su labor en favor de los que soportan la crisis dentro de Venezuela, y el estímulo que ha dado a los países hermanos que están dando muestras de solidaridad con los venezolanos que se han ido del país huyendo de la crisis.
Asimismo, informó a su Santidad sobre la violación de los derechos humanos en general, y le hizo entrega de la lista de los 349 presos políticos que hay en el país, indicando el lugar de reclusión de cada uno de ellos, incluyendo el caso del periodista Jesús Medina, de Lorent Saleh quien acaba de cumplir cuatro años preso, y un Informe sobre el caso del Diputado Juan Requesens, quien ya cumplió 30 días de estar incomunicado con su familia y sus abogados.
Igualmente, Barboza le transmitió a su Santidad la esperanza de que la Iglesia Católica pueda impulsar junto con la comunidad internacional, el restablecimiento de la democracia y de los derechos ciudadanos en el país. Destacó que este tema fue tratado ampliamente en una reunión posterior que el presidente de la de la Asamblea Nacional sostuvo por separado con el Cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, quien fuera Nuncio Apostólico en Venezuela.
Barboza agradeció al Sumo Pontífice la decisión de encargarle la Diócesis de Caracas al Cardenal Baltazar Porras, siempre identificado con las mejores causas del pueblo venezolano, y el reciente nombramiento de Monseñor Edgar Peña Parra, esclarecido sacerdote venezolano de origen zuliano, para ocupar en la Secretaría de Estado del Vaticano la alta responsabilidad que le ha sido asignada. Así como el reconocimiento de la Asamblea Nacional como el poder legislativo legítimo en Venezuela.
Igualmente agradeció la valiente posición de la Conferencia Episcopal Venezolana de estar al lado del pueblo que sufre, y en defensa de los valores democráticos.