Los periodistas y reporteros gráficos del estado Lara son víctimas de abusos y atropellos durante el ejercicio de la profesión. En lo que va de 2018 los profesionales de la comunicación en la región reciben amenazas, insultos, son amedrentados, golpeados, robados y el Poder Judicial al parecer no reconoce el derecho a ejercer el periodismo, porque no castiga a los responsables de la violencia contra los trabajadores de los medios de comunicación.
La mañana de este viernes, el periodista Ánderson Piña y Ángel Zambrano del diario El Informador, recibieron una fuerte golpiza por parte de unos comerciantes mientras realizaban un trabajo de investigación dentro de las instalaciones del Mercado Mayorista de Barquisimeto (Mercabar). Además, fueron amenazados y secuestrados por varias horas.
El presidente de Mercabar, Juan Carlos Sierra, aseguró que el equipo periodístico de El Informador no fue agredido por empleados de esta empresa, ni por funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GBN) y mucho menos por efectivos de seguridad.
“Estos periodistas no fueron agredidos por trabajadores de Mercabar C.A, ni por los cuerpos de seguridad. Fueron los comerciantes, quienes están vinculados al hecho irregular», señaló Sierra.
Se conoció que el principal agresor del equipo periodístico responde al nombre de Johán Dorante, arrendatario del galpón 2A-13. El director de Mercabar se comprometió en hacer que el agresor cancele en su totalidad el equipo destruido en una semana.
Por su parte, la Dirección de Prensa de la Alcaldía de Iribarren emitió un comunicado donde rechazó las agresiones a los trabajadores de El Informador.
Cabe destacar, que el pasado miércoles, el comunicador Yorvi Gracías denunció la persecución de motorizados desconocidos después de la marcha que hicieron los periodistas en el centro de Barquisimeto.
