Para recordar: “Te aconsejo que de Mí compres oro refinado por fuego para que te hagas rico…” (Apocalipsis 3:18).
El 03 de septiembre fue la fecha dispuesta por el gobierno para ofrecer, vender, mini – lingotes de oro. Pero lo que observamos, fue una campaña de información y des información. A la larga terminaron vendiendo un certificado.
Antes de proseguir, pareciera un juego de niños y nos preguntamos ¿quiénes compraron los “lingotes de oro” en papel? La primera respuesta que se nos ocurre: Los incautos; inexpertos; manipulados, los cuales sobran y si nos descuidamos caemos.
Hace algunos días, en la página “conelmazodando” del 23/03/18, publicaron lo siguiente: “El presidente del Banco Central de Venezuela (BCV), Ramón Lobo, indicó que próximamente saldrá a la venta al público los mini lingotes de oro -desde cinco gramos en adelante- que permitirá a la población respaldar sus activos y funcionará como un mecanismo de ahorro”.
Luego el presidente mostró una tarjeta, parecida a una de débito, con un “lingotico” en el centro, presentado en cadena nacional, por televisión, diciendo que las personas podían adquirir tales tarjetas con un pedacito de oro, de 1.5 gramos por un costo de 3.780 bolívares, ó de 2,5 gramos por un valor de 6.300.
Por telesurtv.net, se dijo: “Lo que se venderá por el lingote de oro, será un certificado, canjeable, negociable” (telesurtv.net/news/inicia-venta-certificados…20180903-0004.html). Eso pudiera tener un 50 % de probabilidad, que en días sucesivos dichos certificados valgan muy poco o nada, como le ha pasado a nuestra moneda que le han quitado 11 ceros en pocos años, ya que se trata de un simple papel.
Alguien dijo, no necesito el oro en papel, lo que deseo el oro tangible, un lingote que se pueda tocar, que se pueda guardar o vender de nuevo. Y eso es mejor ¿no es verdad?
Es lamentable como el gobierno ha entregado la explotación del oro a empresas extranjeras y con poca frecuencia muestran unos lingotes, algo así como para justificar la funesta decisión; los cargan, abrazan como si fueran de ellos. Sin contar el grandísimo daño ecológico que le han causado a Venezuela. De paso El Clarín dice que el presidente Maduro envió 2.1 toneladas de oro a los países Árabes (www.clarin.com) ¿Y dónde están los otros lingotes de oro, que movilizó el presidente anterior?
Por su parte el profeta Juan, trasmite las palabras de Jesús, el Hijo de Dios, quien nos invita: “Te aconsejo que de Mí compres oro refinado por fuego para que te hagas rico…” (Apocalipsis 3:18). Es el mismo Jesús que nos invitó que hiciéramos “tesoros en el cielo” (Mateo 6: 20,21).
De acuerdo al Comentario Bíblico Adventista, T5, el “oro representa las riquezas espirituales que se ofrecen como el remedio de Cristo para la pobreza espiritual de los laodicenses. Este “oro” simbólico representa la “fe que obra por el amor” (Gálatas 5:6; Santiago 2:5) y las obras que resultan de la fe (1ª Timoteo 6:18).
Quizá nunca sepamos qué pasó el lunes 03 de septiembre con respecto a los mini – lingotes de oro. Por ello, no podemos confiar en seres humanos o en algunos gobernantes que a cada rato cambian el discurso o las decisiones tomadas en detrimento de sus semejantes ¿Nunca pagarán por ello?
Lo que sí sabemos es que al comprarle “Oro” a Cristo (fe y obras); ropas blancas (su justicia), el colirio (el Espíritu Santo), seremos enriquecidos espiritualmente, y siempre saldremos ganando, porque Él nunca engaña, no cambia y con ello nos proporciona el camino a una Patria mejor, que es la celestial.
