Al menos seis personas murieron, entre ellas dos niños, luego de que un suicida detonó un auto cargado con explosivos en el exterior de un complejo oficial en la capital de Somalia, dijeron las autoridades el domingo.
El atacante intentó acelerar en un puesto de seguridad, pero fue detenido por las fuerzas de seguridad, lo que lo llevó a hacer estallar el auto cerca de la entrada de las oficinas del distrito de Howlwadag, señaló el capitán Mohamed Hussein.
Los tres soldados que dieron el alto a la camioneta fallecieron en el acto, explicó el vocero del alcalde de Mogadiscio, Salah Hassan Omar, añadiendo que las otras tres víctimas mortales eran civiles.
Otras 14 personas, incluyendo seis niños, necesitaron cuidados intensivos, según el servicio de ambulancias Aamin. Entre los heridos estaba el subcomisario del distrito, Ibrah Hassan Matan.
Muchas de las víctimas eran estudiantes de una escuela islamista cercana. Las autoridades advirtieron que podría haber más víctimas ya que la explosión derribó edificios cercanos, incluyendo una mezquita.
«Vi cuerpos esparcidos por el piso tras la explosión, antes de que las ambulancias y los paramédicos llegaran al lugar, y toda la escena era muy fea”, dijo una testigo, Halima Mohamed.
El atacante «fracasó literalmente en su objetivo de lograr el máximo número de víctimas”, añadió Hussein, que acusó al grupo extremista Al-Shabab, vinculado a Al Qaeda, de estar detrás del incidente.
La milicia radical se atribuyó más tarde la responsabilidad por el atentado, que terminó con un periodo de calma en Mogadiscio. Al-Shabab suele perpetrar atentados en la capital, como el que cometió con un camión bomba el pasado octubre, que dejó 512 muertos.