Cientos de venezolanos se vieron forzados el sábado a salir de Brasil después de que ciudadanos de Pacaraima, en Roraima, se manifestaran en contra de su presencia en ese lado de la frontera.
La protesta contra la presencia de los venezolanos se desató por el supuesto asalto de un grupo de inmigrantes de ese país a un comerciante brasileño.
La manifestación acabó de manera violenta cuando algunos manifestantes comenzaron a quemar las tiendas de campañas y los enseres de los venezolanos para tratar de expulsarlos.
Según el ejército brasileño, desplazado a la ciudad fronteriza para atender la llegada masiva de venezolanos, unos 1.200 regresaron a Venezuela el sábado. Este domingo, se pudo ver a algunos emigrantes en la carretera de Santa Elena caminando hacia Brasil, pero en un número mucho menor a días anteriores.