Un grupo de derechos humanos de Nicaragua que ha documentado los asesinatos durante meses de conflicto político, cerrará sus oficinas debido a las múltiples amenazas de muerte y acoso.
La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) dijo en un comunicado que sus oficinas han asediadas por “grupos armados no autorizados y llamadas telefónicas de amenazas”.
También se quejó de las “prácticas ilegales de persecución judicial y criminalización sin fundamento legal que lo motive” contra sus empleados. No identificó a aquellos que considera responsables.
La ONG dijo que fuerzas de seguridad gubernamentales y grupos civiles armados aliados son responsables de la mayoría de las muertes desde el 19 de abril. El presidente Daniel Ortega niega responsabilidad en los asesinatos y acusa a quienes exigen que renuncie al puesto de intentar un golpe de estado.
La ANPDH dijo la tarde del sábado que el cierre es necesario para resguardar la vida e integridad de sus colaboradores y que por ahora sólo tomará denuncias vía electrónica.
Álvaro Leiva, director de la asociación, no pudo ser localizado de inmediato para comentar al respecto.