Una mujer rusa estuvo presuntamente implicada como espía trabajando para la embajada de EE.UU en Moscú, basados los agentes legales en reuniones regulares y no autorizadas con el servicio ruso de inteligencia del Servicio Federal de Seguridad (FBS) años antes de que levantara sospechas durante una de las revisiones rutinarias, de seguridad de la oficina regional, se descubren presuntas actitudes que la convierte en presunta espía.
Esta mujer le estaba dando más información de lo que debía al Servicio Federal de Seguridad, la oficina de seguridad general alerto a la embajada y fue despedida, a pesar de que no tenía información «altamente clasificada» a pesar que su entrada a este cargo que asumió esta supuesta «espía» todos los extranjeros al momento de optar por un trabajo los investiga
El departamento de estado declinó hacer comentarios y dijo que «no hacen ningún comentario sobre las denuncias relacionadas con asuntos de inteligencia o personal y no tenemos información sobre este presunto incidente» además alegaron que «en ningún momento estuvo en condiciones de obtener secretos de seguridad nacional»