“En los años 70, apasionado por la meditación, Steve Jobs quería renunciar e irse a la India. Entonces su jefe encontró un compromiso: en la sede Europea había un problema, si él lo resolvía, después podría ir la India con los gastos pagados por la empresa y así fue», Nolan Bushnell.
La doceava actividad tiene que ver con pensar en lugares tales como: Un autobús, el baño y la cama. Son lugares claves para la creatividad. En un autobús el matemático Poincaré llegó a un importante descubrimientos. En el baño Arquímedes descubrió la flotación. En la cama el Químico Kekulé soñó la relación entre los electrodos y el benceno ( que después se reveló verdadera ) Einstein confesó que muchas ideas buenas le llegaban mientras se afeitaba.
La decimotercera habla de hacer algo para los ricos. Uno de los límites a la innovación está en el precio que tendrán los productos, que corren el riesgo de costar mucho. De todos modos esta no debe ser una restricción. Solo los ricos podían permitirse al principio teléfonos, aviones, automóviles, microondas, computadoras, etc. Y así,es mejor idear productos para los ricos, para quitar un límite a la creatividad.
La decimocuarta tiene que ver con lanzar los dados. ¿Tienes que tomar una decisión importante? Lanza los dados! Pareciera absurdo, pero la aleatoriedad nos ayuda a romper la rutina, a escoger caminos que de otra manera no tomaríamos jamás, a probar nuevos desafíos.
La decimoquinta tiene que ver con cambiar lo más posible. Efectivamente, en los años 80 el músico Frank Zappa para contrastar una caída de su creatividad, pensó en levantarse cada día una hora más tarde, con el fin de llegar a levantarse a las ocho de la noche e ir a dormir al mediodía. Pero cuidado, no es necesario llegar a tanto para hacer que el cerebro sea más elástico.
Definitivamente, estudios sobre el cerebro demuestran que si se habla y camina al mismo tiempo, es muy probable que lleguen buenas ideas.