Profesores de distintas casas de estudio de Caracas, han rechazado las nuevas tablas salariales aprobadas por el Ministerio de Educación Universitaria, debido a que las mismas no fueron consultadas con los distintos gremios que hacen vida en el sector.
En este sentido, Víctor Márquez Corao, presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Central de Venezuela, explicó que el gobierno se sentó a discutir el incremento de sueldos y salarios con el sector oficialista que solo representa a un pequeño número de trabajadores universitarios.
“Las tablas salariales aprobadas a espaldas del sector universitario obligan la profundización del conflicto. Son sueldos de miseria. Nos están condenando a la indigencia con unos salarios que no corresponde a la realidad económica que tiene Venezuela”, sentenció.
Asimismo reveló que los docentes de esta casa de estudios se mantendrán en sesión permanente, con el fin de seguir estudiando nuevas acciones de lucha que obliguen al gobierno a sentarse a discutir con todos los sectores.
“Vamos a seguir discutiendo si el gremio va a paro indefinido para exigir la dignificación del salario y las condiciones laborales”, precisó.
Asimismo, el representante gremial señaló que continuarán las acciones de protesta, pero los detalles de las actividades se darán a conocer en los próximos días.
Sueldos dignos
Por su parte, la secretaria de actas de la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv), Keta Stephany, exigió que el sueldo de un obrero “debe ser igual al costo de la canasta básica”.
Asimismo pidió que los trabajadores sean incluidos en la discusión de los salarios, porque son los únicos que pueden determinar si los montos son suficientes o insuficientes.
“El Ministerio solo hace acuerdos con la federación del maletín”, haciendo referencia a la Federación de Trabajadores Universitarios de Venezuela (FTUV), única organización que fue tomada en cuenta para la discusión de las tablas salariales.
“Los representantes legítimos del gremio no son tomados en cuenta por el Ministerio. Rechazamos de manera contundente que una federación minoritaria, que no representa a nadie, avale los salarios de hambre que el Gobierno quiere imponernos”, concluyó la profesora Stephany.