Se comenta a voz populi que en nuestro país todo se perdió y que aquí no vale nada, ni bienes ni propiedad ni la gente, que aún hay un gentío pero muy poca “Gente” lo leí en una revista de España, apreciaciones muy fuertes que en nada benefician a nuestra patria, sus razones tendrán pero el noventa por ciento del venezolano dicen todo lo contrario, se perderían muchas cosas pero menos el honor de este alto porcentaje que cuando los demás creen que están arrinconados es cuando rugen más fuerte, como esos tigres barreteados o de Véngala, con sangre ardiente,dispuestos a la defensa como una tigresa recién parida parida en defensa de sus cachorros, esa es la verdadera situación de nuestra patria el noventa por ciento de gente de buena voluntad con ánimo de hacer y un diez por ciento es deshacer apostando a la destrucción; pero estemos plenamente seguro que se impondrá el bien y por supuesto la mayoría que opta por el bien.
Consientes que los soberbios y los bravos se castigan asimismo, no hay duda que pronto se verá el resultado de los que aman la discordia y andan en busca del conflicto y contrapunteo de insultos van insultos vienen, como resultados en busca de enemigos imaginarios que funcionan solo en mentes sin capacidad de alianzas, estrategias que den resultados positivos a ambos; ¿a quien benefician los busca líos? Claro que a nadie, los guapetones solo lo espera chucumbele, eso está muy claro y no tiene pele, ese es el destino de un disociador que caza enemigos con sus discursos vacuos que ni enseñan ni dejan dividendos si no un semillero de enjambre de odio y rencores, ojala Gandhi no tenga razón cuando dijo “Si hay un idiota en el poder los que los eligieron se sienten bien representados”.
Cuando han dicho que aquí todo está perdido debemos desmentir categóricamente que no se debe decir ni pensar así por tener muchos valores, que no habrá fuerzas que lo destruya, ejemplo una sociedad civil, cada día más resteada en defensa y vigilia permanente, vociferando en el mundo el peligro que amenaza al país y pensando en positivo, por el bien de todos una rectificación a tiempo de quienes atropellan y amenazan de forma inclemente ya que no podemos creer que así tan despectivamente se puede cambiar la idiosincrasia de un país donde existió una simbiosis por el progreso y bienestar de todos, jamás nunca será aceptada una división entre buenos y malos o ricos y pobres, todos somos hermanos y por tal amémonos unos a los otros fuera el odio y la desintegración familiar.
Invito a que todos luchemos , no todo está perdido, estemos consciente que aquí existen muy buenas voluntades, arraigados en una forma creativa, un conglomerado empresario creativos que es un gran aliado a la producción y un estímulo a continuar por el rescate del éxito, la solvencia económica estructural y moral del país a salir de la fábrica de pobres a combatir el hambre a tratar de producir con honestidad y talento , demostrarle a los taimados que si se puede vivir y convivir, producir y compartir honestamente, demostrar que la perseverancia del espíritu se convierte en eficaz baluarte de la virtud; cualquiera que sea la circunstancia hay que apostar a la alegría y no al aburrimiento no a las preocupaciones ni tristezas recordemos que Dios no se a mudado.
Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.