Cristiano Ronaldo falló un penal que le costó a Portugal el primer lugar de su grupo en el Mundial.
Con gran sufrimiento, Portugal quedó segunda en el Grupo B tras empatar el lunes 1-1 con Irán. Los campeones europeos se medirán ahora con Uruguay el sábado en Sochi por los octavos de final.
En vez de Cristiano, Ricardo Quaresma fue el autor del gol para los lusos. El veterano extremo de 34 años respondió a su primera titularidad del torneo con uno de los tantos más bonitos del torneo.
Quaresma disparó con el empeine izquierdo al ángulo del arquero de Irán Alí Beiranvand para poner en ventaja a los lusos en el estadio Morodovia Arena de Saransk, escenario de un duelo de máxima tensión con dos penales sancionados mediante el sistema de revisión por video, uno de los cuales falló el astro del Real Madrid.
Simultáneamente, el gol de Iago Aspas en los descuentos le dio a España el empate 2-2 ante Marruecos en Kaliningrado. España, como primera de la zona, se las verá con la anfitriona Rusia el domingo en el estadio Luzhniki de Moscú.
Ronaldo, quien no pasó una buena noche por una ruidosa manifestación de hinchas iraníes frente al hotel que alojaba a Portugal, desperdició un penal sancionado por el árbitro paraguayo Enrique Cáceres mediante VAR tras una falta del zaguero Saeid Ezatolahi contra el delantero a los 52 minutos. El capitán luso ejecutó la pena con un derechazo al medio que contuvo Beiranvand.
Fue el 19no penal cobrado en Rusia, el cual marcó un nuevo récord para un Mundial.
La ejecución fallida puso fin a la racha goleadora de Cristiano en Rusia – cuatro goles en tres partidos – y lo equiparó la marca negativa de su competidor por el trono Lionel Messi, quien también malogró un penal para Argentina en el empate 1-1 ante Islandia.
Portugal tomó la iniciativa y apenas jugados dos minutos el propio Cristiano cruzó un derechazo que contuvo el arquero iraní. Desde entonces, cada avance luso ponía en evidencia la fragilidad defensiva del conjunto asiático. A los nueve Joao Mario ensayó un remate apenas por arriba tras un fallido despeje de Ezatolahi, que le valió un insulto y empujón del arquero iraní.
Fueron varios minutos de acoso constante, pero Portugal estuvo poco fino en los metros finales hasta el gol de Quaresma. Justo cuando Irán había equilibrado el trámite y casi logra la ventaja con un cabezazo de Ezatolahi que atajó el arquero Ruí Patricio bien ubicado.
El penal atajado a Cristiano revitalizó a los dirigidos por su compatriota Carlos Queiroz. Con nada por perder, Irán jugó con desenfado y mereció el empate que caso consigue con un derechazo rasante de Saman Ghoddos.
En un final para el infarto, el árbitro paraguayo otra vez recurrió al VAR por una supuesta mano de Cedric en el área de Portugal. El capitán Karim Ansarifard ejecutó al ángulo para empatar. En la agonía, Mehdi Taremi dilapidó el gol que le hubiera dado a Irán un triunfo histórico, ya que nunca ha sorteado la primera ronda en un Mundial.