Este sábado los diputados a la Asamblea Nacional por el estado Lara Guillermo Palacios, Bolivia Suárez y Macario González, acudieron a la Planta de tratamiento del acueducto de Barquisimeto ubicada en la población de San José en Quíbor, a fin realizar una inspección en el lugar y recabar evidencia que pudiera ayudar a superar la crisis de agua en Lara.
Los parlamentarios responsabilizaron al presidente Nicolás Maduro y a la gobernadora del estado Lara, Carmen Meléndez de lo que pueda ocurrir con la paralización del suministro de agua en Lara.
A los diputados de la AN les fue prohibida la entrada al lugar a pesar de haber esperado cinco horas en la entrada del lugar a la espera de la autorización para entrar.
Los diputados indicaron que la prohibición de la entrada a la planta de tratamiento “demuestra el miedo del régimen a que se conozca la verdad de lo que ocurre y el engaño a que han sometido a la población con las excusas para para paralizar el suministro de agua”, dijo el diputado Guillermo Palacios.
“Es necesario señalar que en la primera parada que señalaron que era para mantenimiento de los equipos por la turbidez del agua debido a las crecientes de los afluentes de la represa Dos cerritos y el arrastre de sedimento era por falta de mantenimiento preventivo. No tenían los equipos en condiciones de asumir la época de lluvias y se encontraron con que los filtros y sedimentadores de la planta estaban colapsados”, aseguro Palacios.
El diputado también denuncio la falta de insumos químicos como el sulfato de aluminio y cloro “que impedía el bombeo de agua limpia, transparente, potabilizada y en condiciones óptimas de ser consumida”
Palacios señaló que se debe tener en reserva para épocas de crisis alrededor de 90-100 toneladas de Sulfato de aluminio, “sin embargo no guardaban en stock nada, lo que los obligo a anunciar otra parada diciendo que no tenían sulfato de aluminio y que llegaría en los próximos días”.
Los diputados pudieron constatar que a la planta llegaron solo 26 toneladas de sulfato de aluminio. “En horas de la mañana, mientras estábamos allí salió un camión pequeño con cinco toneladas para la planta de tratamiento de El Tocuyo”.
Palacios hizo un llamado a la colectividad larense a mantenerse “alerta frente a las mentiras del gobierno y que exijamos la realización del debido control social porque esto es una irresponsabilidad criminal al exponer a una población de más de 1.500.000 habitantes a esta zozobra de no disponer de un elemento vital para todas las actividades diarias de la comunidad”, concluyó Guillermo Palacios.
