El presidente brasileño, Michel Temer, realizará mañana una visita a la frontera con Venezuela, para conocer algunos de los centros de refugiados que acogen los ciudadanos de esa nación que emigran hacia ese país.
De acuerdo con fuentes oficiales, el mandatario viajará desde Brasilia a Boa Vista, capital del fronterizo estado de Roraima, y se desplazará también a Pacaraima, municipio situado 215 kilómetros al norte, límite con Venezuela.
En ambos casos, Temer visitará las estructuras instaladas por el Gobierno para dar acogida a los inmigrantes venezolanos, calculados en unos 40 mil y que han llegado a ese estado durante el último año y medio, huyendo de la crisis económica, social y política en que se ha sumergido su país.
En Boa Vista, en los últimos meses han sido instalados ocho albergues supervisados por diversos grupos de derechos humanos y organismos internacionales, como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), en los que están alojados unos 4.500 venezolanos.
En su gran mayoría, los venezolanos que han llegado a Roraima han conseguido empleo y se mantienen por sí solos, así como muchos otros optan por radicarse en otras zonas de Brasil, incluso mediante planes del Gobierno brasileño para asentarlos en otras ciudades.
Pero, esas iniciativas no han descomprimido la situación en Boa Vista, donde las autoridades calculan que hay cerca de 6.000 venezolanos en situación de “vulnerabilidad” económica y social