En la cotidianidad, pasamos y vivimos básicamente en cuatro areas:
1. Afectivo social.
2. Laboral.
3. Salud.
4. Amor – erótico.
En estas áreas va fluyendo la vida, diariamente, vivimos las rutinas, pasamos de la vida social, a la laboral, a la de pareja y la personal con nosotros mismos, relación mente cuerpo.
Cada día desde que estamos en interrelación, surgen tensiones propias de cada vivencia, que iremos enfrentando y al resolverlas se convertirán en oportunidades para la evolución y el crecimiento.
Aprender y evolucionar. Dejarán un repertorio al que tendremos en cuenta cuando enfrentemos adversidades conflictos. Así vamos adquiriendo herramientas y estrategias que nos facilitan la vida y nos van llevando a sintonizar con la vida.
Vivimos el stress, como el impulso que nos lleva a satisfacer necesidades con ganancia. La energía vital se magnifica y la cosmovisión es propicia.
Todo este escenario que hoy planteo es el ideal para mantenernos enérgicos, escribiendo la historia que nos toca en salud e interacción plena.
El estado ideal.
Continuaré en la próxima publicación dando variables de este modelo y sus consecuencias.