Si no se devuelve la autonomía al Banco Central de Venezuela(BCV) y no se reduce el gasto público, entre otras medidas de política económica responsable, la nueva reconversión monetaria anunciada recientemente por el gobierno de Nicolás Maduro, no tendrá impacto positivo alguno en la economía venezolana.
Así lo expone el economista Óscar Torrealba, investigador del Observatorio de Gasto Público (OGP) del Centro para la Divulgación del Conocimiento Económico (Cedice Libertad). El experto resaltó que, en el mejor de los casos, en un escenario de hiperinflación como el que se vive en Venezuela, la reconversión no pasará de ser una medida “contable” para facilitar nominalmente las transacciones.
-Con una inflación acumulada que puede estimarse en 3.000%, sin contar con la que se acumula desde 2008,cuando tuvo lugar la primera reconversión monetaria, no es de extrañar que en el curso de un año la economía venezolana vuelva a tener los ceros que van a eliminarse desde junio-, advirtió Torrealba.
También aclaró que si se realiza de manera planificada y con las medidas señaladas anteriormente, que incluyen la necesidad de que el gobierno deje de emitir dinero sin respaldo, sí podría tener efectos positivos, como ha ocurrido en otros países del mundo. Sin embargo, es pesimista respecto a que ese sea el caso venezolano.
Para el economista el hecho de que hace menos de un año se haya puesto en vigencia lo que llamaron una “ampliación” del cono monetario, que incluyó un billete de Bs. 100.000, da lugar a pensar que “o fue improvisada la ampliación o lo fue la reconversión”.
Dinero y gasto público
Asimismo, a propósito del cono monetario que aún está vigente, y que tenía prevista la eliminación del billete de Bs. 100, que aún no ha ocurrido, Torrealba alertó sobre los costos que tendrá la reconversión, no solamente en materia de gasto público.
-Los billetes ya impresos y emitidos se convertirán en dinero perdido ante los nuevos; eso representa una pérdida de fondos públicos. Pero hay que añadir que no podemos estar seguros de la capacidad del gobierno para realizar el proceso en tan breve tiempo-, sostiene.
Al respecto, recordó que habitualmente una reconversión se da en un período de un año: seis meses para educar a la ciudadanía sobre los cambios y otros seis en los que el cono monetario nuevo y el saliente conviven. No obstante, los venezolanos solo contarán con dos meses para el proceso, alertó.