Al menos 64 personas, entre ellas nueve niños, murieron y decenas seguían desaparecidas el lunes tras el incendio que arrasó un centro comercial en la ciudad rusa de Kemerovo, en Siberia occidental.
Los servicios de emergencia y los bomberos continuaban buscando víctimas entre los escombros del centro comercial de 1.500 m2, cuyo techo se derrumbó, indicaron los medios de comunicación rusos.
«Actualmente, se ha confirmado la muerte de 64 personas», informó el Comité de Investigación en su canal Telegram.
Al menos nueve niños figuran entre las víctimas, según una portavoz local del ministerio de Situaciones de Urgencia, Borisa Dediujina, citada por la agencia de noticias rusa Ria Novosti.
Las autoridades locales, que anunciaron tres días de duelo, afirmaron haber encontrado «numerosas violaciones» de las normas de seguridad en el centro comercial, entre ellas la ausencia de señalización en caso de incendio y las salidas de emergencia cerradas en el cine donde se declaró el fuego.
«La cuestión es la siguiente ¿por qué las puertas estaban cerradas?», se indignó el vicegobernador de la región, Vladímir Chernov, citado por la agencia TASS.
Por su parte, el presidente ruso Vladímir Putin, presentó sus «profundas condolencias» a los allegados de las víctimas por boca de su portavoz, Dmitri Peskov.
Un niño de 11 años y una joven de 18 años que saltaron de un tercer piso para escapar a las llamas se encuentran en un estado grave, indicó la ministra de Salud, Veronika Skvortsova.
Nueve personas más están hospitalizadas, agregó.
Los otros heridos «se encuentran en un estado casi satisfactorio pero muchos han perdido a parientes en el incendio y algunos a sus hijos», declaró la ministra de Salud.
El incendio comenzó hacia las 11H00 GMT del domingo en el tercer y último piso del centro comercial situado en la avenida Lenin, en el centro de Kemerovo.
«Negligencia»
El comité de investigación ruso anunció la apertura de una investigación criminal y la detención de cuatro personas, entre ellas el arrendatario del local donde se declaró el incendio y el director de la sociedad gerente del centro comercial.
La televisión rusa difundió imágenes que mostraban espesas nubes de humo que salían de las ventanas del edificio varias horas después del comienzo del incendio, que fue dominado recién a las 17H30 GMT.
Pero el lunes por la mañana comenzó a salir de nuevo humo, provocando que los bomberos volvieran a activar las mangas de agua.
El centro comercial que incluía varias salas de cine y restaurantes y un sauna estaba lleno de gente el domingo.
El incendio causó daños por unos 3.000 millones de rublos (unos 42,6 millones de euros).
«La causa del incendio es la negligencia. El no respeto de las normas es la causa catastrófica de la desgracia que vemos hoy», declaró en la televisión Anna Kuznetsova, delegada ante el Kremlin para los Derechos Infantiles.
«Estos centros comerciales existen en casi todas las regiones. Este drama es una señal para verificar su seguridad», agregó.
Testigos del incendio explicaron a la televisión que no se escucharon alarmas de incendio.
«No hubo ningún anuncio, la gente comenzó a correr hacia la salida. Luego hubo un olor a quemado. Nos dimos cuenta que no era un ejercicio», declaró una mujer a la televisión Rossia 24.
El incendio, que según los primeros elementos de la investigación, se inició en una sala de cine y destruyó más de 1.000 metros cuadrados del centro comercial, indicaron los medios rusos.
Se abrió una investigación por «violación de las normas de seguridad que comportó la muerte por imprudencia de al menos dos personas», anunció el Comité de Investigación.
Este incendio es uno de los más mortíferos ocurridos en los últimos diez años en Rusia.
El 5 de diciembre de 2009 murieron 156 personas en el incendio de una discoteca en Perm, en los Urales, provocado por fuegos artificiales.
El 21 de marzo de ese mismo año, 63 personas perecieron en el incendio de una residencia de ancianos en Kamychevatskaia, sur de Rusia.