La alegría de los santarroseños se hizo evidente este sábado 24 de marzo, cuando la imagen de la Divina Pastora retornó al templo que ha sido su hogar desde varios años: el Santuario Santa Rosa de Lima, tras cumplir con la visita 162 de la patrona sentimental de los larenses a Barquisimeto.
Aunque en esta oportunidad, la salida de la Iglesia San Antonio María Claret fue más temprano de lo habitual, ya en la misa de despedida se empezaban a agrupar y poco a poco se fueron sumando hasta que la imagen de la Excelsa Patrona cruzaba el arco de la Sociedad Divina Pastora, ubicado unos metros más abajo de la calle 8.
Los cánticos y rezos eran los acompañantes ideales para el camino de poco más de 3 kilómetros que existen entre la Claret y Santa Rosa. Familias enteras, elevaron sus oraciones y plegarias a la Virgen, como un gesto de agradecimiento hacia Ella y los favores concebidos, así como también para hacer sus peticiones, algunas por salud, por la familia y en muchos otros casos por Venezuela.
A pesar de que el inicio del camino los cuerpos de seguridad no estuvieron desplegados como en años anteriores para garantizar la tranquilidad y la paz de los ciudadanos en el recorrido, a lo largo del mismo se les observó en puntos claves como en la Avenida Lara con Bracamonte y Los Leones.
El paso de quienes cargaban en sus hombros la imagen de la Madre de Dios bajo la advocación de la Divina Pastora era lento, debido al intenso sol y fuerte calor, cada ciertos metros los grupos eran cambiados y voluntariamente feligreses se sumaban y tenían el honor de llevar en hombros a la patrona larense.
El tan esperado encuentro entre la Virgen Santa Rosa de Lima y la Divina Pastora estuvo cargado de mucha emotividad, ambas imágenes se encontraron de frente y antes seguir su recorrido por la bajada de Santa Rosa, la imagen de la pastorcita hacía su reverencia hacia Barquisimeto como una manera de despedirse de la ciudad que cada año la recibe con mucha fe y devoción.
Los fuegos artificiales y los cantos de los feligreses pusieron el toque del tradicional encuentro a la altura del Restaurante Tiuna, mientras ambas vírgenes se rendían ante sí como un gesto de bienvenida.
Pasadas las 04:30 pm de este sábado, ya la imagen de la Excelsa Patrona traspasaba el arco de la entrada principal del poblado de Santa Rosa, en cuya plaza Bolívar fue dispuesto un altar frente la puerta principal del Santuario para celebrar la Eucaristía de bienvenida a la Pastora de Almas.
Tras el recorrido que duró 70 días por 57 parroquías, 3 vicarías y una iglesia filial, la Pastorcita larense volvió a casa y reposa en su nicho para mañana acompañar a su pueblo al inicio de la Semana Santa con el tradicional Domingo de Ramos.
Nuevo vestido
El vestido que hoy lucía nuestra hermosa virgencita era color lila pálido, diseñado por la señora Lola de Yánez, quien le ha confeccionado 50 vestidos a la Virgen y fue donado por la Sociedad Divina Pastora.
Está hecho de raso francés con hilos y encajes de oro traídos de Dubai, el cual incluye las más de 2800 puntadas en la falda.El sombrero de plata que luce fue el usado en su procesión número 50 y la corona del Niño tiene pedrería con tonos similares al del vestido. El báculo es el mismo del regreso de 2016 y el peinado corresponde a la procesión del 2005.
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