El precio del kilo de azúcar a nivel de anaquel, debería estar en el orden de los 150.000 bolívares, de acuerdo con la estructura de costos que ha venido manejando la Federación de Sociedades de Cañicultores de Venezuela (Fesoca), reveló el presidente de la organización gremial, José Ricardo Álvarez.
Advierte que las expectativas en cuanto a la zafra de este año, no son muy alentadoras, por cuanto se estimaba que estarían cosechando unas 3,5 millones de kilos de caña de azúcar, pero ante la falta de insumos como fertilizantes, agroquímicos, repuestos para las maquinarias y equipos, es muy probable que no se pueda alcanzar este objetivo, lo que significaría en una baja en la producción de 40 mil toneladas de azúcar refinada.
Destacó asimismo que existen otros factores que inciden en la baja en la producción de caña de azúcar, como es el caso de la mecanización, ya que anteriormente el proceso estaba en un 80% mecanizado y en la actualidad la mecanización oscila entre un 60 y 70%, afirmando que el 50% de las cosechadoras están paralizadas, como consecuencia de la falta de repuestos y de las divisas para poder realizar las importaciones en forma directa de estos insumos.
Asimismo, Álvarez expuso su preocupación ante los periodistas, por cuanto el Estado venezolano que siempre había considerado a la caña de azúcar entre los rubros bandera, de acuerdo con las declaraciones de altos voceros del Ejecutivo, ha dejado de ser considerada como uno de los rubros prioritarios.
El presidente de Fesoca indica que en estos momentos, solo los centrales en manos del sector privado están operativos, reconociendo que entre los centrales del Estado uno de los que está mejor montado y que tiene las maquinarias más modernas, además de estar muy bien ubicado, es el Central Azucarero Ezequiel Zamora (CAEZ), afirmando que si realmente tuviera dolientes, pudiera ser uno de los más importantes del país.
Propone como una medida urgente, la flexibilización de la Ley de Ilícitos Cambiarios, ya que de esta manera los propios productores podrían gestionar las divisas e importar los insumos y repuestos que requieren para impulsar la producción nacional, no solamente de caña de azúcar, sino tambien de otros rubros.
Por otra parte, entre las alternativas que maneja Fesoca, está la de elevar a la consideración del Ejecutivo, que se libere el precio del 80% del azúcar, y se mantenga el precio regulado para el 20% del producto destinado a los programas sociales del Gobierno, asegurando que esto también permitiría a los cañicultores obtener los recursos para impulsar la cañicultura nacional.