La precaria situación que están viviendo los educadores venezolanos por falta de incentivos a la meritoria labor que realizan en pro de las nuevas generaciones les están llevando, lamentablemente, a emigrar a otros países en busca de mejoras socioeconómicas.
Lo planteó así Luis Arroyo Cortez, presidente de la seccional Lara del Colegio de Profesores de Venezuela.
Dijo que el tema de la diáspora de docentes fue tratado en el último consejo directivo nacional ampliado de la institución, considerado de grandes proporciones.
Arroyo, en base a informes extraoficiales, calcula que más del 40 % de los profesionales de la educación han abandonado Venezuela rumbo a otros países, como Colombia, Ecuador y Perú, entre otros, donde le es reconocida su profesionalización.
Con respecto al estado Lara, explicó que más de 500 docentes han solicitado al Colegio de Profesores sus constancias de colegiación para, luego de apostillarlas, emigrar a otras naciones, en primer lugar a Perú.
Le llama la atención el que muchos se van sin haber renunciado formalmente, con lo que ponen en riesgo sus cargos o prestaciones, e incluso, de incurrir en sanciones pues, incluso, a 1.287 el Ministerio de Educación les abrió procedimientos administrativos.
Arroyo informó que los ingresos de los docentes son de apenas 1.500.000 bolívares máximo para aquellos que laboran 36 horas semanales.
Orángel Primera, presidente de Sumalar, por su parte, calculó en más de 30 % la cantidad de docentes que han emigrado últimamente en busca de mejores reivindicaciones sociales que sí han encontrado en otras naciones “donde sí reconocen su trabajo”.
