Producir 60.000 toneladas de roca fosfática en 2018, para atender 80% de la demanda nacional de fertilizantes para la actividad agrícola, proyecta la empresa Fosfatos del Suroeste (Fosfasuroeste), filial de la Corporación Venezolana de Minería (CVM), anunció el presidente de la empresa, Alexander Astudillo, revela el Ministerio para el Desarrollo Minero Ecológico.
De acuerdo con la información, Fosfasuroeste tiene en estos momentos, un inventario de 1.992 toneladas de fosforita micronizada, para la venta en los próximos días y evalúa alianzas estratégicas con unidades de producción del Estado, para la elaboración de abonos orgánicos como los superfosfatos (fertilizantes a base de fósforo y calcio), los NPK (fertilizantes que contienen nitrógeno, fósforo y potasio), así como otros productos orgánicos que tengan como base el fósforo.
Agrega la información que Fosfasuroeste aspira a optimizar este año los procesos de producción, con la puesta en marcha de una planta de micronizado, con estándares internacionales y con nueva tecnología, para reducir el impacto ambiental en las zonas de explotación minera e igualmente establecer un laboratorio para la certificación de los controles de calidad y manejo de los productos.
Se recuerda que la fosforita es un fertilizante natural, proveniente de rocas fosfáticas del estado Táchira, producido por la empresa minera Fosfasuroeste para bajar la acidez de los suelos con vocación agrícola.
Astudillo refirió que en 2017, la empresa distribuyó durante los últimos cuatro meses, 202 toneladas de fosforita en los estados Táchira, Mérida y Trujillo, así como en zonas de vocación agraria como Barinas y parte del Sur del Lago en Zulia.
Destaca la información emanada del despacho oficial que según estudios realizados por científicos de la Universidad Central de Venezuela (UCV), las rocas de fosfato tienen 27% de fósforo y varios microelementos, como el calcio y el carbono, los cuales dan un mayor aporte a la nutrición de las plantas y a la recuperación de los suelos, lo que implica una mayor eficiencia agronómica y altas posibilidades de competir ventajosamente con el fertilizante fosforado importado, favoreciendo de esta manera la producción agrícola nacional.