Las recientes restricciones impuestas por el Gobierno a sus actividades, ponen en riesgo sus mercados y amenaza con frenar el crecimiento que experimentan desde el año pasado, asegura en un comunicado la Asociación Venezolana de Exportadores (Avex).
Aseguran que el año 2018 inició con tres restricciones para exportar que generan gran desconfianza, después de cerrar el año 2017 con un crecimiento de las exportaciones no petroleras del 30% interanual, señala Avex.
Las medidas mencionadas son la suspensión de exportaciones de productos agroalimentarios, prohibición de exportaciones de desechos metálicos y el cierre de comunicación aérea y marítima con las islas Curazao, Aruba y Bonaire.
Aseguran que estas medidas convierten a las empresas exportadoras venezolanas, en proveedores no confiables en el mercado internacional y por tanto susceptible de ser sustituido por otro proveedor, advierten.
Recuerdan en su comunicado, que las exportaciones no petroleras el año pasado, alcanzaron $3.000 millones, un alza de 30% con respecto a 2016 y que revirtió la tendencia negativa que venía arrastrando.
Destacan que con el cierre de comunicación con Curazao, Aruba y Bonaire se “está afectado el comercio legal”, mientras que la prohibición de exportar productos agroalimentarios agrega el requisito de una certificación de venta de los productos afectados por la medida, ni se tomó en cuenta los dólares al Banco Central de Venezuela.
En relación con los desechos metálicos, exigen reglamentar la medida, porque su aplicación se hace con discrecionalidad por parte de los funcionarios aduaneros.
Adicionalmente, solicitan revocar las medidas de prohibición para no afectar los ingresos no petroleros de divisas al país ni los mercados que ya tienen fuera de Venezuela.