El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, calificó este miércoles de «muy merecidas» las sanciones impuestas el lunes por la Unión Europea (UE) a siete altos funcionarios venezolanos.
Las sanciones, que incluyen una congelación de activos y la prohibición de viajar al bloque, conciernen entre otros al ministro del Interior Néstor Reverol, al director del servicio de inteligencia, Gustavo González, y a Diosdado Cabello, número dos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), acusados por la UE de «graves violaciones de los derechos humanos».
La tarde del martes, Maduro arremetió de nuevo contra Rajoy, acusándolo de «racista» y «colonialista» y de dirigir «el gobierno más corrupto que jamás se haya conocido en la historia de España».
«Mariano Rajoy, ponte en cuatro paticas compadre, que este pueblo lo que te va a dar es pela (azotes)», añadió el dirigente venezolano.
Reaccionando a estos comentarios, Rajoy lamentó en la radio Onda Cero que «no es la primera vez» que Maduro lo ataca, aunque aseveró que eso «[le] trae sin cuidado».
El dirigente español añadió que «ahora la Unión Europea ha aprobado unas sanciones muy merecidas, y que son sanciones leves por las brutales decisiones y por la forma de entender la democracia del señor Maduro».
«Me parece sensato y razonable que la Unión Europea se ocupe de este tema, que España lidera, porque es su su obligación, porque alguien tiene que ayudar a las personas que están siendo tratadas como están siendo tratadas en Venezuela», incidió Rajoy.
«Venezuela hoy se ha convertido en el primer país del mundo cuyos nacionales piden asilo en España. Lo único que quiero para Venezuela es democracia, libertad, derechos humanos, que se respeten las personas y que los presos políticos salgan a la calle», agregó.
Las del lunes son las primeras sanciones individuales adoptadas en la crisis venezolana por la UE, que en noviembre aprobó un embargo de armas y de material susceptible de usarse para la «represión interna».
El punto de inflexión para la adopción de sanciones fue la elección a fines de julio de la Asamblea Nacional Constituyente en Venezuela, después de cuatro meses de protestas que dejaron 125 muertos en las calles.
Por su lado, el gobierno de Rajoy, en el poder desde fines de 2011, ha acogido a destacados opositores venezolanos, entre ellos el ex alcalde de Caracas Antonio Ledezma, llegado a Madrid en noviembre.