¿De qué se trata esta figura legal?
¿Un ciudadano común puede optar por esta opción para poder emigrar?
Las razones que motivan a las personas a dejar un país son complejas y varían dependiendo de cada individuo, esta decisión viene acompañada de un autoanálisis del entorno en que se vive y las dificultades que se presenten al tratar de alcanzar una calidad de vida óptima para el nativo y los suyos.
En Venezuela la gran ola migratoria ha aumentado cada vez más hacia varios destinos de todos los continentes, siendo ocasionada por factores internos y la búsqueda de un futuro mejor que garantice una vida plena y llena de oportunidades. Ante esta realidad los que buscan salir del país tratan de buscar distintas opciones para entrar legalmente a la nación destino y actualmente es común escuchar que muchas optan por el Asilo Político, sin saber a ciencia cierta de que se trata.
La Directora de la firma consultora Legalys y especialista en migración, Dra. María Montoya comenta que pareciera tenerse la creencia que por el simple hecho de vivir en un país con ciertas condiciones que afectan la calidad de vida, se le otorgará Asilo a todo aquel que lo solicite, realidad que no es cierta.
“Esta figura legal se refiere a la protección que se le brinda a todo ciudadano perseguido por crímenes políticos. Es aquí donde materializamos el hecho de que el asilo político ha sido mal aplicado y su uso como salida rápida ha sido desmedido, lo que puede conllevar a consecuencias devastadoras para los ciudadanos que opten por esta opción causadas por la desinformación o mala asesoría en materia migratoria”.
En estos caso la especialista recomienda que la mejor manera de emigrar inteligentemente, es consultando con expertos en el área que diseñen un plan migratorio que le permita la obtención de visas permanentes y le garanticen un nuevo estatus migratorio; de esta forma facilitando el camino para el cumplimiento de sus sueños y proyectos a futuro.
“El asilo político no es garantía de un estatus migratorio, ya que sólo es otorgado por razones específicas, una vez la razón que lo otorga deja de existir pierde su efecto legal, quedando la persona en un estatus de turista y viéndose obligado a regresar a su país de origen” destacó la Dra. Montoya.
De ahí radica la importancia de obtener una residencia permanente que le garantice a la persona y su grupo familiar una estabilidad en el nuevo país de residencia, por ello es esencial informarse antes de tomar una decisión a la ligera y para que el proyecto de vida fuera de su nación natal pueda cristalizarse de manera óptima.
