Yohander Javier Villacinda Pérez, de 23 años de edad, fue ejecutado por cuatro sujetos armados, a las 10 de la noche del lunes, en el estadio de Santo Domingo, luego de que le dieron un disparo en la espalda y sus criminales lo terminaron de ejecutar con un disparo en la cabeza.
Villacinda Pérez, residente de la calle 8 de Santo Domingo, al oeste de Barquisimeto, salió en horas de la noche de su casa, se fue hasta la esquina que sus amigos estaban jugando chapita, estuvo allí un rato y posteriormente se despidió cuando el reloj marcaba las 10:40 de la noche. En el momento en que iba caminando por una zona oscura, del río salieron cuatro sujetos armados y el joven echó a correr.
Marbella Ortiz cuenta que su sobrino comenzó a correr tratando de escapar de los maleantes y al no conseguir para dónde meterse brincó y se metió al estadio, allí lo alcanzaron y le dispararon por la espalda, fue cuando cayó y estos lo despojaron de su cartera, su teléfono celular que era de última generación, su reloj y los zapatos de marca que había comprado en diciembre, posterior a ello lo ejecutaron dándole un disparo en la cabeza, mientras Villacinda Pérez estaba en el piso.
Cuando fueron a avisar de lo sucedido, la familia se apresuró porque de inmediato se corrió el rumor que indicaba que aparentemente era al joven a quien habían herido y al llegar al sitio, ya no había qué hacer, no tenía signos vitales.
Ortiz indicó que la víctima fatal era el mayor de seis hermanos y padre de dos niñas de 2 y 3 años de edad, relató que trabajaba desde hace 8 meses en una tienda en donde compraban oro, ubicada al centro de la ciudad y todo lo que allí agarraba era para la comida y cosas de las niñas, sin embargo estaba comprando plásticos, porque tenía pensado irse para Colombia y vender el plástico y buscar trabajo en el país vecino, pues aseguraba que la situación económica estaba difícil.
La dama aseguró que Villacinda Pérez era una persona trabajadora.
Según las primeras indagaciones del Eje de Homicidios del Cicpc Lara, el móvil del robo es el que maneja, pero no descartan otras hipótesis.
La víctima fatal según la página del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) tenía un registro por robo agravado del año 2012 por el que le dictaron privativa de libertad y ordenaron su reclusión en Uribana.