Delegados del gobierno y la oposición de Venezuela continuarán el sábado las negociaciones que realizan en la República Dominicana en busca de un acuerdo «de convivencia» que conduzca a soluciones para la crisis que afecta a su país.
«Estamos muy cerca de un acuerdo definitivo de convivencia y paz», dijo el ministro de Comunicación Jorge Rodríguez, quien encabeza la delegación del gobierno venezolano, en conferencia de prensa después de la medianoche.
Sin ofrecer detalles de los avances de la negociación, el funcionario aseguró que durante la jornada del viernes, que se extendió por más de 12 horas en la Cancillería dominicana, «nos hemos acercado de manera profunda» a varios puntos.
Los representantes de la Mesa de la Unidad Democrática, una alianza de una veintena de partidos opositores, no habían emitido comentarios a la prensa tras el encuentro.
Las delegaciones del gobierno y de la Mesa discuten en Santo Domingo una agenda de seis puntos, que incluye las demandas de la oposición de que haya garantías para realizar elecciones presidenciales, la apertura de un canal humanitario para llevar alimentos y medicinas a la población, así como la liberación de dirigentes políticos.
El gobierno también exige el cese de una supuesta guerra económica, el reconocimiento por parte de la oposición de la Asamblea Constituyente, que funciona desde mediados del 2017 y ha sido criticada por varios países, y el rechazo a las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea.
Rodríguez consideró que el eventual acuerdo de convivencia será la base que «permita combatir la agresión económica, que permita combatir las sanciones» impuestas por otros países a Venezuela.
El canciller dominicano Miguel Vargas aseguró en conferencia de prensa que la jornada del viernes fue «exitosa» y «productiva» y anunció que el diálogo continuará la mañana del sábado.
La reunión había comenzado al mediodía del viernes con la presencia del gobernante dominicano Danilo Medina y el expresidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero _quienes fungen como mediadores_, así como los cancilleres de Bolivia, Chile, México, Nicaragua y San Vicente y las Granadinas en calidad de observadores.
Tras siete horas de discusión, las delegaciones habían pedido un receso para analizar por separado los avances y volvieron a encontrarse alrededor de las 23:00 horas locales. Poco después de la medianoche Vargas anunció que el encuentro se reanudaría el sábado para «tratar de concluir» algunos de los puntos.
El presidente venezolano Nicolás Maduro manifestó en Venezuela su esperanza en que los resultados que surjan de la negociación en Santo Domingo permitan avanzar para consolidar la paz. Un día antes, el gobernante se comprometió a dar garantías plenas para las elecciones de este año.
«Que la gente tenga certeza de que no hay otra razón por la cual estamos aquí que aliviar la crisis, los problemas y el drama que estamos viviendo (en Venezuela)», dijo a periodistas el coordinador del partido Primero Justicia, Julio Borges, quien encabeza la delegación opositora.
La reunión se realiza en momentos en que los cancilleres de México y Chile, cuya participación fue solicitada por la oposición, habían expresado esta semana algunas dudas sobre el diálogo, lo que generó críticas por parte de la presidente de la Asamblea Constituyente, Delcy Rodríguez, quien también participa en la delegación del gobierno.
La Cancillería mexicana explicó en un comunicado que la participación de su titular Luis Videgaray «permitirá identificar el compromiso y seriedad del gobierno y la oposición venezolanas para alcanzar un acuerdo».
El diálogo entre ambas partes comenzó en septiembre en Santo Domingo, y en diciembre se celebraron las dos primeras rondas de negociación con la participación como observadores de los cancilleres de seis países.