Al menos 21 civiles, entre ellos ocho niños, murieron en bombardeos de aviones rusos y sirios en la provincia de Idlib, noroeste de Siria, afirmó este lunes el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
Los bombardeos, ocurridos el domingo, le costaron la vida a 11 miembros de una misma familia cerca de la localidad de Sinjar, no lejos del aeropuerto militar de Abu Duhur, que las tropas gubernamentales intentan reconquistar, indicó el OSDH.
Las fuerza gubernamentales conquistaron el domingo Sinjar, situada a 14 kilómetros de Abu Duhur.
El 25 de diciembre, las tropas gubernamentales apoyadas por la aviación rusa lanzaron una ofensiva para reconquistar el sureste de la provincia de Idlib, indicó el OSDH.
La provincia de Idlib, la única que escapa completamente al control del gobierno, está dominada por la exrama siria de Al Qaida (ex Frente Al Nusra).
«Los bombardeos del gobierno y de la aviación rusa continuaban este lunes en varias regiones de Idlib», dijo a la AFP Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
El objetivo de la ofensiva, además del aeropuerto de Abu Duhur, es garantizar la seguridad en una carretera que une la ciudad de Alepo, segunda más importante de Siria, con Damasco.
La guerra en Siria estalló en 2011 tras la sangrienta represión de manifestaciones pacíficas por parte del gobierno de Bashar al Asad.
Luego se transformó en un conflicto con complejas ramificaciones internacionales y la participación de países extranjeros.
Más de 340.000 personas murieron en casi siete años de guerra, que causó además millones de desplazados y refugiados.