Los ataques en contra de supermercados, abastos y expendios de alimentos en todo el país por parte del régimen de Nicolás Maduro, forman parte de un plan para destruir los últimos residuos de productividad en Venezuela.
Así lo denunció el diputado a la Asamblea Nacional por el estado Anzoátegui, Omar González, quien condenó las medidas y afirmó que el próximo paso es el sometimiento de la población mediante los alimentos.
«El objetivo del Gobierno nacional es el de promover la escasez y asfixiar a la sociedad hasta que ésta se someta a los métodos autoritarios del régimen», advirtió.
Indicó además que el sistema implementado, solo busca controlar todos los mecanismos de acceso de alimentos para luego chantajear a la sociedad con bolsas de comida y con la entrega de tiqueras que el ciudadano solo podrá canjear por comestibles en puntos escogidos por el Gobierno.
«Maduro impulsa los saqueos para terminar de arruinar a los expendedores privados de alimentos; y no es de extrañar que las resistentes empresas que aún restan en el país sean expropiadas en el marco de un proceso de acelerar el ritmo de la destrucción nacional», comentó.
El parlamentario le hizo un llamado a la ciudadanía a mantenerse firme ante la «brutal arremetida» del Gobierno nacional y a seguir en resistencia para lograr a libertad de Venezuela.
Para el dirigente nacional del movimiento político Vente Venezuela, llegó la hora de que los venezolanos salgan a las calles a pedir «anaqueles llenos» y libertad.
«En Venezuela se presenta la unión de dos gritos diferentes: ‘Libertad’ y ‘Hambre’, dos sentimientos que llevarán al régimen a precipitarse sin remedio», sentenció.