“Saludo a todos los lectores de este medio que ha mantenido una línea independiente y la vocería de la verdad”, expresó el Dr. Conrado Pérez, ex parlamentario, economista y docente, al referirse al nuevo aniversario de EL IMPULSO.
“Lo hago porque este diario no se ha autocensurado como otros y los ciudadanos podemos manifestar nuestra preocupación ante lo que está ocurriendo en el país, agregó. No es posible admitir que el jefe del Ejecutivo Nacional anuncie que irá a presentar la memoria y cuenta de su gestión a la Asamblea Nacional Constituyente, inconstitucional”.
El Presidente dejó de respetar la Ley Orgánica de Régimen Presupuestario y, por supuesto, la Constitución.
En primer lugar, tiene la obligación de acudir a la Asamblea Nacional para que haga una valoración de su gestión, la apruebe o no..
En segundo lugar, es definitivamente absurdo, irresponsable y violatorio lo que ha venido haciendo el Presidente cuando se ha mostrado dadivoso con sus partidarios en vez de crear fuentes de crecimiento de la economía. En el país hay un deterioro en todos los factores económicos y lo que sobresale es el alto costo de la vida y la especulación, que engrandece la miseria.
Cuando este régimen estableció el control cambiario, se disparó el dólar y ha sido un fracaso su política monetaria al punto que hoy hay escasez de efectivo. motivo por el cual se han producido casos de alteración en algunas entidades bancarias. Además al no haber dinero, la especulación se ha intensificado porque elementos inescrupulosos juegan con la necesidad de la gente..
Este año será terriblemente peor al que acaba de finalizar porque no hay confianza, ni seguridad jurídica y económica.
Desde hace tres años el BCV no publica la movilidad del estado financiero.
La situacion es delicada, grave, de desastre y lo que nos causa preocupación es que los economistas que hemos venido analizando todo este cuadro, formulamos nuestras alertas; pero, lamentablemente tenemos un gobierno sordo, incompente e insensible, que abona la corrupción y el derroche.
Maduro trata de impresionar a quienes les da quinientos mil bolívares, pero ese dinero apenas le alcanza a los beneficiarios para un cartón de huevos y un litro de aceite.