Ninguno de los seis aumentos del salario mínimo y del bono alimentario decretados por Nicolás Maduro ha ejercido un efecto de alivio, ni ha remediado la capacidad adquisitiva de los trabajadores.
Al hacer la afirmación Claudio Fermín, aspirante a la presidencia de la República, indicó que esos incrementos han sido una falsa esperanza, fundamentalmente por dos razones: una, porque nos encontramos acosados por una hiperinflación, y la segunda, porque el Estado no funciona, ya que no garantiza los derechos de salud, educación y seguridad a la población..
Aumento engañoso
El sociólogo y dirigente político manifestó que la gente se encuentra muy preocupada porque en una situación de híper inflación los bienes de consumo aumentan diariamente y algunas veces, varias veces el mismo día, como consecuencia de la escasez, ya que no pueden ser importados porque tampoco hay dólares porque el Gobierno con su política equivocada de control de cambio, los ha hecho escasear.
Además, este régimen quebró el aparato productivo. Y cada vez que se decreta un incremento en el salario mínimo y el bono para la alimentación, el empleador privado tiene que reducir su nómina de personal para mantener su establecimiento abierto o cerrarlo.
Ese aumento es engañoso, ya que es mayor el monto del bono para alimentación, el cual no entra en las prestaciones del trabajador y, además, con esos incrementos por los efectos híper inflacionarios no alcanzan para nada.
Estado irresponsable
Cuando se refirió al Estado ineficiente dijo Fermín que los enfermos que acuden a los hospitales tienen que llevar hasta la inyectadora y el algodón porque los centros asistenciales carecen de insumo. Si en esos institutos no hay medicinas, tampoco pueden ser conseguidas en las farmacias y están condenados a morir aquellos pacientes que sufren de diabetes, hipertensión, cáncer y otros males.
Cada día se hace más difícil que las personas puedan ser transportadas porque las unidades colectivas también escasean cada día porque la mayor parte de ellas carecen de repuestos, especialmente cauchos, baterías y lubricantes.Y no hablemos de inseguridad ciudadana, porque prácticamente ya no existe un habitante que no haya sido víctima de la delincuencia.
Gobierno incapaz
Este régimen tiene sometida a la población a engaño, resaltó Fermín. Es un gobierno incapaz. No ha tenido el coraje, la valentía, ni el más mínimo deseo de rectificar sus errores. Y el error vertebral es querer controlarlo todo.
Porque es dueño de puertos, aeropuertos, bancos, hoteles, líneas aéreas, transporte de combustibles, industrias petrolera, gasífera, del hierro y del acero, de galpones haciendas, fábricas, centrales azucareros, plantas procesadoras de café, supermercados y, en fin, de todo tipo de actividad económica; pero, no produce más que corrupción y destrucción.
Este régimen, que comenzó denunciando la burocracia, ha multiplicado los organismos.
Hay 44 ministerios y vicepresidencias, aparte de corporaciones, empresas, institutos y otros entes para incorporar más empleados a la abultada nómina pública ineficiente.
Los ingresos del país, petroleros o los que genera el pago del Impuesto sobre la Renta, en vez de ser utilizados en nutrición, salud, seguridad, espacios para la recreación, se tienen que distribuir entre centenares de organismos, empresas confiscadas y en la alta burocracia militar y chavista. Como no hay dinero con respaldo, se imprime el inorgánico.
En la medida en que se imprime más dinero se genera mayor inflación y el bolívar pierde valor.
El Presidente considera que la solución es que ofrecer 500 mil bolívares a aquellas personas que voten por los candidatos del oficialismo y después darles un “bono de reyes”, según ha dicho, a ocho millones de personas.
Este régimen que acabó con las bodegas, el libre mercado y secuestró la voluntad de muchas personas, a quienes les entrega la caja denominada Clap, lo primero que hizo fue humillar a las familias, que ahora reciben los alimentos subsidiados por necesidad y cuando se le ocurre, porque Maduro cree que con esos escasos productos puede vivir una familia uno o dos meses.
Es por ello que Venezuela reclama un giro de 180 grados, expresó. Necesitamos que se cambie este modelo político y económico porque es un disparate. Cada vez es mayor la desnutrición de la población y la gente está huyendo hacia otros países.
Estoy comprometido con el cambio de gobierno porque éste ha entregado la soberanía a otras potencias. En estos momentos deciden los rusos, los chinos y los iraníes más que los habitantes de Barquisimeto, Quíbor o El Tocuyo.
Cambio económico
Quiero levantar la voz para decir que lo mas urgente es el cambio de políticas económicas, planteó Claudio Fermín, quien considera que las últimas medidas de Maduro en vez de expresar rectificación, revelan una inmensa irresponsabilidad.
En primer lugar, no hay dinero para cumplir con los aumentos de salario y bono para la alimentación, por una parte.
En segundo término, la políticas erradas en la economía profundizan la híper inflación.
En tercer lugar, la regaladera que ha ofrecido está agrandando el estado de mendicidad cuando lo que requiere el país son políticas para impulsar el trabajo y la creación de riquezas, que permitan a las familias el ahorro y una situación de mejora en su condición social.
En cuanto a la reunión Gobierno y oposición en República Dominicana, Fermín considera que más allá de la presencia de mediadores u observadores, debe ponerse como aspecto fundamental el tema económico, claro está sin dejar de hacer los reclamos contenidos en la agenda (elecciones justas, liberación de presos políticos, reconocimiento de la Asamblea Nacional, canal humanitario).
En este sentido, acabar con el control cambiario y el control de precios, ya que los mismos han perjudicado enormemente a Venezuela.
Candidatura de oposición
Fermín como aspirante a la presidencia de la República dice que el país tiene el derecho a personificar el cambio.Este tiene que ser pacífico y para la escogencia del candidato tiene que ser tomada la opinión de la gente, no de un grupito, de una élite o de una discusión en un salón.Está de acuerdo con un colegio electoral, encuestas o consenso, pero no excluyendo a las masas populares.Esto hay que discutirlo con calma, sentenció.