Entre desacuerdos y argumentos se instaló este viernes la junta directiva de la Asamblea Nacional que estará a cargo durante el tercer año del periodo 2016- 2021. Con Omar Barboza (UNT) de presidente, Julio César Reyes (AP) de primer vicepresidente y Alfonso Marquina (PJ) de segundo vicepresidente, el Parlamento atravesará uno de los años más difíciles de la República, según la dirigencia opositora.
Al iniciar el acto legislativo, el presidente saliente, diputado Julio Borges, agradeció la presencia del cuerpo diplomático y de los medios de comunicación; aseguró que el Parlamento ha resistido a la violencia y se ha ratificado ante el mundo como un poder legítimo y promotor de una salida pacífica a la crisis que padecen los venezolanos.
Seguidamente, su colega Juan Guaidó, procedió a postular a Barboza, Reyes y Marquina, no sin antes recordar que están en el deber, como cuerpo parlamentario, de honrar compromisos pendientes, lo cuales se resumen en lograr un cambio político definitivo para el país. Agregó que la palabra empeñada en 2015, cuando resultaron electos, los obliga a estar unidos y a resolver las diferencias que existan dentro del seno de la unidad.
El diputado José Gregorio Aparicio, de Prociudadanos, manifestó su disconformidad ante la propuesta debido a que no fue consultado por ninguna fracción; asimismo, criticó la manera como se ha llevado la negociación internacional que existe entre Gobierno y oposición puesto que, a su juicio, no desencadenará respuestas positivas.
En ello, lo secundó Omar González, de la fracción 16 de julio, quien señaló que salvarían el voto dado que voceros de “algunas organizaciones políticas” tenían como oferta pública la convivencia con el régimen a través de la Constituyente. Resaltó que existen dos agendas: la que exige un cambio político verdadero y la de cohabitar con la ANC a cambio de unas elecciones. González calificó de parodia el diálogo que se está llevando en República Dominicana.
«No nos sentimos representados por esa Junta Directiva, ni por quienes van a dialogar en Dominicana», advirtió al tiempo que pidió votación nominal.
Antes de hacerlo, el diputado Henry Ramos Allup, aclaró a sus compañeros disidentes, “que imitan conductas del Gobierno”, que no se está llamando a la implosión del único órgano electo por el pueblo que le está haciendo frente al oficialismo. “Nosotros no vamos a convocar guerra mundial ni civil. Tampoco vamos a convocar a eventos para que los muertos sean los hijos ajenos del pueblo, porque ninguno ha sido hijo de un dirigente político”, dijo.
Ramos, duramente criticado, aseguró que en política se reciben cuestionamientos justos y otros no tanto, y por ello era necesario ratificar que la oposición no sigue el juego al presidente Maduro y a los que lo acompañan; por el contrario, están haciendo el esfuerzo de buscar una salida pacífica mediante la negociación. “En política hay que doblarse para no partirse”, subrayó.
En ese sentido reconoció la labor de Borges por haberse arriesgado y colocar su “cara en el asador”. Finalizó su intervención, aclarando que existe un acuerdo entre partidos, que dice que para este año le correspondía la presidencia a Un Nuevo Tiempo.
Brevemente, Borges tomó la palabra para decirle a la fracción disidente que “ojalá que la energía que gastan aquí, la invirtieran para combatir al Gobierno”. Ordenó realizar la votación nominal, quedando 102 diputados a favor de la junta escogida y cinco que salvaron el voto.
Luego de juramentarse los tres dirigentes, se escogió a Negal Morales (AD) y José Luis Cartaya como secretario y subsecretario respectivamente.
Barboza, en sus palabras como nueva autoridad del Legislativo, indicó que orientará su gestión a la reconstrucción de la MUD como alternativa para el cambio, impulsará leyes prioritarias y fomentará una alianza nacional de solidaridad humanitaria.
Destacó que habrá disposición al diálogo, incluso si se trata del oficialismo, por lo que las resultas de las conversaciones en República Dominicana se respetarán a cabalidad. Ello incluye el planteamiento de un nuevo CNE y la supuesta convivencia que tendría que hacerse con la Constituyente. “Veremos que ocurre en esos casos”, dijo para mantener expectativa.
Barboza:“Estamos abiertos a dialogar con el oficialismo”
El nuevo presidente de la Asamblea Nacional, se mostró el viernes dispuesto a dialogar con sectores del oficialismo, lo que podría abrir un proceso de distensión entre el gobierno y el Legislativo, que han mantenido una pugna en los últimos dos años.
Al asumir la presidencia del Parlamento en el nuevo período anual de sesiones, el diputado Omar Barboza anunció que estaba abierto a conversar con todos los sectores, incluido el oficialismo, y a promover la «reconstrucción de la unidad democrática» como alternativa para el cambio político en el país suramericano agobiado por una crisis económica, política y social.
Desde que la oposición asumió el control del Congreso en enero de 2016 ha mantenido constantes enfrentamientos con el gobierno, los que se intensificaron luego de la instalación en agosto pasado de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente que asumió las competencias legislativas de la Asamblea Nacional.
«Nos encontramos ante el riesgo cierto de la disolución de la República en medio de la anarquía y la ausencia del Estado de derecho», dijo Barboza, un experimentado político de 73 años, al plantear que el país requiere un «cambio profundo» del modelo político que gobierna Venezuela, que consideró como «populismo totalitario».
Asimismo, el también dirigente del partido Un Nuevo Tiempo llamó a la oposición a superar los desencuentros y «reconstruir la unidad», y dijo que colaboraría en el proceso para un eventual diálogo entre el gobierno y la oposición que se adelanta desde septiembre del año pasado con el apoyo de la comunidad internacional y que se espera retomar la próxima semana en República Dominicana.
En una muestra de las divisiones que imperan en la oposición, la nueva directiva de la Asamblea Nacional no contó con el apoyo de cinco de los 104 diputados opositores presentes en la sesión, quienes objetaron a Barboza por presuntamente avalar a la Constituyente. Barboza es identificado como muy cercano al excandidato presidencial Manuel Rosales, quien ha participado como delegado de la oposición en el proceso de diálogo y ha sido acusado por algunos sectores opositores de negociar con el oficialismo.
La coalición opositora, integrada por una veintena de partidos, entró en una crisis tras las protestas callejeras que se registraron entre abril y julio pasado y que dejaron más de 120 fallecidos y varios centenares de heridos. Las manifestaciones antigubernamentales fueron respaldadas en las calles por algunos congresistas opositores y la anterior directiva de la Asamblea Nacional encabezada por el diputado Julio Borges, quien fue señalado por el presidente Nicolás Maduro de promover una conspiración contra su gobierno y exigió su enjuiciamiento por supuesta «traición a la patria».