Los rectores de la Universidad Metropolitana (UM) y Simón Bolívar (USB), Benjamín Scharifker y Enrique Planchart respectivamente, llevaron a cabo un balance de las necesidades de las casas de estudio superiores durante una entrevista en Unión Radio.
«El tema presupuestario es gravísimo. Lo que ha sucedido el año pasado y va a pasar este año es que el presupuesto asignado da para cubrir los gastos mínimos de funcionamiento de las universidades, es decir, sueldos y salarios, providencias estudiantiles, autobuses, comedores, y algunos gastos de electricidad y aseo, por unos pocos meses. La consecuencia de esta falta de autonomía es que la universidad no puede administrarse y no puede desarrollar programas», dijo Planchart.
Agregó que tampoco hay autonomía en cuanto a la selección de estudiantes. «No hay autonomía prácticamente en ningún aspecto y la consecuencia de todo eso es la diáspora. Un profesor universitario ganando 50 u 80 dólares mensuales no puede sobrevivir y lo que ocurre es que reciben ofertas de otras universidades de otros países donde les pagan hasta 5 mil dólares mensuales», indicó tras destacar que a lo referido anteriormente hay que añadir la diáspora estudiantil.
Por su parte, Scharifker afirmó que no es muy distinta la situación que viven las universidades privadas. «Si bien las universidades públicas reciben presupuesto fiscal, las privadas cuentan con los recursos de las matrículas y ninguno de los dos casos son suficientes hoy en día para sufragar el alto costo que tiene la educación superior», apuntó.
Sostuvo que si se desea progreso es indispensable contar con educación de calidad. «Para solventar la actual situación en la Universidad Metropolitana hemos implementando sistemas de becas y de financiación para los estudiantes.
Actualmente tenemos un 20% de la población estudiantil que recibe apoyo de algún tipo», refirió al resaltar el aporte de la empresa privada al respecto.
Ambos rectores coincidieron en señalar que a pesar de la desinversión y fuga de talentos, las universidades venezolanas mantienen su posición entre las mejores de la región latinoamericana.