Pese a su frágil estado de salud por un cáncer de médula ósea ahora inactivo, este año el cantautor venezolano Yordano tuvo muchas razones para estar agradecido.
Su álbum «El tren de los regresos» fue nominado a un Latin Grammy, y su tratamiento le permitió realizar una pequeña gira por Estados Unidos, así como pasar unos días en Caracas, donde ofreció tres conciertos a casa llena. También volvió al estudio a trabajar en un nuevo disco.
Es algo de lo que habla largamente y con entusiasmo, pero al preguntarle qué lo sostiene tras casi cuatro años de quimioterapias, un trasplante de médula, complejos tratamientos, complicaciones y un aluvión de fármacos, se emociona hasta las lágrimas y necesita hacer una pausa.
«Toda la ayuda que he recibido desde que hice público lo que estaba pasando, y últimamente con lo de GoFundMe», dijo el músico a The Associated Press el viernes en referencia a la campaña de recolección de fondos ManantialdeCorazónparaYordano, que en dos meses ha levantado casi la mitad de los 250.000 dólares requeridos para continuar su tratamiento.
«Para mí es muy difícil esto, no es fácil», expresó en una entrevista telefónica desde su residencia en Nueva York, adonde se mudó con su esposa Yuri debido a su enfermedad. «Y bueno, por un lado la energía de la gente en la calle, la gente que me decía, ‘Yordano, rezo por ti'».
Cuenta que tras el trasplante de médula al que se sometió hace casi tres años perdió unos 30 kilos (66 libras) de masa muscular y que al principio tuvo «que aprender a caminar» de nuevo.
El tratamiento posoperatorio es largo y complejo. Yordano explicó que tomaría en total seis años para que su cuerpo acepte por completo las células madre que recibió de un donante, y que costearlo solo se le ha vuelto complicado, pues no puede trabajar como antes y no tiene seguro de salud en Estados Unidos.
«Ese proceso requiere de un seguimiento y tratamiento continuo. Cada vez se va espaciando un poco más, a menos que haya algún inconveniente en el trayecto», dijo, pues mientras tanto su sistema inmunológico está comprometido.
Cuando viaja, lo hace con guantes y mascarilla, y aun así ha pescado algún resfriado. En sus últimos conciertos pasó el 90% del tiempo sentado.
«La condición física no es la misma, y en este proceso uno sigue envejeciendo, no hay vuelta atrás», dijo el cantante de 66 años, dejando soltar una pequeña carcajada. «Uno se acostumbra. Uno va llevándolo».
Yordano di Marzo es cantautor de clásicos del repertorio pop venezolano como «Manantial de corazón», «Perla negra», «En aquel lugar secreto», «Locos de amor» y «Días de junio». En «El tren de los regresos» (Sony Music, 2016), nominado al Latin Grammy al mejor álbum pop vocal tradicional, hizo un recorrido por sus décadas de trayectoria acompañado por artistas como Franco De Vita, Ricardo Montaner, Santiago Cruz, Carlos Vives, Kany García y Gian Marco.
«Yo quiero seguir logrando lo que estamos logrando ahorita en la parte del oficio, la parte profesional, la parte de la música», concluyó el artista, quien espera lanzar su nuevo disco el próximo año.