Un día después de ser electo presidente de Chile, Sebastián Piñera puso la mirada en el vecindario regional, en particular en Venezuela.
El multimillonario centroderechista confió el lunes en que la oposición y el gobierno de Venezuela logren un acuerdo que permita para superar las diferencias y se recuperen las libertades, para lo cual su gobierno intentará contribuir en lo que pueda.
«Vamos a colaborar con países amigos que también compartan la defensa» de los principios y valores de las libertades, la democracia, el estado de derecho y los derechos humanos, dijo en su primer encuentro con la prensa extranjera tras su triunfo el domingo en la segunda vuelta electoral.
Chile es uno de los 12 países americanos del llamado Grupo de Lima, el cual ha sido crítico del gobierno del presidente Nicolás Maduro, al que ha llamado a respetar el estado de derecho y liberar a opositores políticos.
Piñera, quien ya gobernó el país entre 2010 y 2014, iniciará su segundo mandato el 11 de marzo de 2018, tras derrotar al senador Alejandro Guillier, quien no pudo lograr que la izquierda se mantuviera en el poder.
La presidenta Michelle Bachelet le entregará la presidencia también por segunda vez.
El ingeniero comercial de 68 años también esperó mantener un buen trato con el gobierno de Bolivia, que en distintos momentos ha tenido fricciones por su reclamo a Chile de una salida al mar.
«Vamos a buscar las mejores relaciones con el pueblo y el gobierno boliviano», comentó y dijo que ambos países firmaron en 1904 un Tratado de Paz y Amistad, que se encuentra vigente y en el que se establecen las fronteras bilaterales.
El presidente boliviano Evo Morales ya felicitó por su triunfo a Piñera, quien agradeció el gesto.
Bolivia y Chile se enfrentaron en una guerra entre 1879 y 1883 en la que los bolivianos perdieron su litoral. En 2013, el gobierno de Evo Morales demandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia para obligar a Santiago a negociar una salida al mar para Bolivia. Chile a su vez demandó por aguas fronterizas en disputa. Ese tribunal todavía analiza ambas demandas.
«Tengo la más profunda convicción de que vamos a proteger y resguardar la soberanía de nuestro país y la integridad territorial de Chile», dijo Piñera.
Interrogado sobre la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel y trasladar su embajada desde Tel Aviv, se limitó a decir que para Chile «la mejor y tal vez la única solución al conflicto que ya lleva décadas en esa zona del mundo es la existencia de dos Estados, libres, soberanos e independientes», recordó.
En el terreno nacional, la bolsa de valores subió poco más de seis puntos el lunes, horas después de la elección del empresario.
«La reacción que han tenido los mercados, que ha sido muy favorable, refleja ese compromiso con lograr que Chile recupere el liderazgo, el dinamismo en materia de crecimiento, de desarrollo humano, con un solo objetivo, mejorar la calidad de vida de todos nuestros compatriotas», dijo el mandatario electo.
El gobierno de la presidenta Michelle Bachelet sufrió los efectos de un bajo crecimiento económico y una pronunciada caída de inversiones, luego que empresarios rechazaron una reforma tributaria que les subió cuatro puntos en el mismo número de años.
Piñera recordó el lunes que trabajará para cumplir su promesa de campaña de atraer inversiones por 40.000 millones de dólares para reactivar proyectos paralizados.
El gobierno de Bachelet terminará con un crecimiento promedio de 1,8% al año. En el primer mandato de Piñera, la economía tuvo un crecimiento de un 5% anual en promedio.