El comedor es el epicentro de las problemáticas según lo señalaron los representantes que decidieron reservar su identidad por temor a que sus hijos fueran sometidos a algún tipo de represalia por parte de la Escuela Técnica Industrial (E.T.I) La Carucieña, ubicada en la populosa zona.
Aparentemente la situación principal se presentó el jueves y viernes de la semana pasada, días en los que no se tuvo presencia de los estudiantes debido a que en las instalaciones de la institución se celebró un Congreso Pedagógico, en el que participaron solo docentes.
Fueron precisamente en esos días cuando se realizó el suministro de alimentos de parte del Programa de Alimentación Escolar (PAE). Específicamente el jueves llegó el camión con las frutas y algunas verduras, según mencionó una de las representantes; si bien el vehículo estuvo escoltado, sus conductores aparentemente aseguraron que había sido amenazado con robarle la mercancía, pero no fue así.
El viernes supuestamente quienes viven en las cercanías de la escuela visualizaron cómo el personal salía con piña, patilla, yuca e incluso algunas harinas; denunciaron.
El mayor problema que ven con respecto a la situación es que mientras esto ocurre, lo más de mil estudiantes que hacen vida en la institución deben recibir tazones de comida “para niños de preescolar”, expusieron los padres.
Aseguraron que si bien llegó harina, la misma no se utiliza en la ETI puesto que no se les da desayuno a los jóvenes, a pesar de que estos duran gran parte del día recibiendo clases. El almuerzo no cuenta con proteico, por lo que el menú se basa únicamente en caraotas acompañadas con pasta o con arroz.
Además de esto, algunos estudiantes señalaron que las condiciones de la institución no son las mejores y que a pesar del tiempo que deben mantenerse en las instalaciones, no cuentan siquiera con baños dignos ni filtros de agua; situación que se mantiene desde hace años. Igualmente deben luchar con la falta de profesores para las materias correspondientes.
Comida sobró
Por su parte, la subdirectora académica, Sonia Rodríguez, expuso que no se ha recibido ninguna queja por la situación, mientras que narró que ciertamente recibieron los camiones de comida la semana pasada.
Explicó que la ETI es centro de acopio, es decir, recibe la comida de 18 instituciones. Entre lo enviado el pasado viernes, se recibió un lote muy grande de piñas que sobraron incluso cuando ya se había hecho la distribución.
Aparentemente se dio la orden de que las mismas fueran repartidas debido a que no tenían donde almacenarlas. Al no tener presencia de estudiantes, se regaló a los docentes que se encontraban en la actividad y a miembros de la comunidad; expresó Rodríguez.
“Hubo gente que pensó que estaban saqueando, pero no, es que eran demasiadas e iban a pasar el fin de semana bajo el sol y la lluvia; se prefirió hacer eso a que se dañaran”.
Con respecto a la cantidad de comida que surten a los estudiantes dijo que desde hace un mes no se les envía proteico, por esto y por la situación del país general dijo “¿usted cree que se puede dar la misma cantidad de antes?”.
Aseguró que la institución solo una vez dio desayuno pero que los estudiantes aparentemente hicieron una especie de guerra de comida, por lo que se suspendió dicho servicio.