“Nacido como artista y adoptado por la comunicación social”, así se define Yelkim Rodríguez, joven creativo, emprendedor y luchador, oriundo de Acarigua, estado Portuguesa. Nos cuenta que, desde muy pequeño, su pasatiempo era jugar con lápices, colores y temperas, tanto así que una de las primeras palabras que aprendió a pronunciar fue lápiz; al llegar la época escolar, su entrega por las manualidades y los actos culturales eran su fascinación. “Me compraban blocks de dibujo, creyones y demás materiales para manchar”, así más tarde, llegó al único curso de dibujo que ha realizado y que le sirvió para dejar volar su imaginación y guiarse únicamente por lo que siente.
Entre sus otras afinidades destacan, la televisión, el cine, la radio y la transformación de espacios, a través del arte. Hoy, es licenciado en comunicación social y estudiante del VII semestre de licenciatura en artes plásticas, mención fotografía. Además, se destaca por un novedoso trabajo artístico, basado en la geometría y lo abstracto… pero antes de seguir conociendo más de lo que hace, quisimos preguntarle si ¿de ilusiones se puede vivir? A lo que nos respondió: “¡Si se vive! La vida está llena de ellas y aun cuando no puedes verlas, las puedes sentir porque hablan de quien eres como ser humano”.
iLugeo
¿Cuál es el concepto que enmarcan tus obras?
Un reflejo de quien soy como ser humano y artista, llevado a una forma geométrica porque me gustan las cosas con excelencia y abstracta porque no todo en la vida es perfecto.
¿Qué nos dices del proceso creativo y de elaboración?
Fue complejo, estuve en la búsqueda de una perfección que no existe y a la vez sí, porque puedes palparla en las obras, mediante una descomposición de figuras geométricas perfectas, que pasan a ser imperfectas e irregulares, acompañadas de más de 100 tonalidades grisáceas, obtenidas con la mezcla del negro y blanco (haciendo alusión a la oscuridad y a la luz), mostrando así que las ilusiones tienen altos y bajos.
¿Qué materiales usaste?
Utilicé lienzo de diferentes dimensiones y formatos. Agregado a ello, pintura al frio blanca y negra, envases de plástico, pinceles de diferente grosor, cartón en kilo alumbre, pega blanca, paletas de madera y grapadora.
¿Cuántas piezas son y qué tiempo te llevó crear cada una?
Son 40 piezas agrupadas en unitarios, trípticos y poli dípticos. Duré aproximadamente 12 días consecutivos creando, en su mayoría de noche, porque era el tiempo disponible en realizar todas las piezas.
Es común asociar las ilusiones con colores ¿Por qué no hay colores en tus obras?
Bueno es relativo, no utilicé color porque cada una de esas obras reflejan lo mucho que me costó materializar mis ilusiones, pues diversos señalamientos y críticas me afectaron en muchas ocasiones; sin embargo, no me impidieron continuar. Al contrario, me dieron más fuerza y está reflejada en los grises que para mi representan firmeza.
¿Qué fue lo primero que lograste crear con esta técnica?
Lo primero que logré crear fue un montón de triángulos, cuadrados y rectángulos sin sentido, pero me ayudaron a drenar y lo disfruté muchísimo…
¿Qué otras representaciones artísticas te gustaría poder realizar?
Me encantaría experimentar arte colectivo con personas que no tengan conocimientos académicos de las plásticas… Para aprender de ese arte ingenuo que fluye de manera espontánea.
¿Hasta dónde sueñas llegar con tu trabajo?
Sueño con muchísimas cosas (risas), pero a corto plazo, ir a New York con una de mis exposiciones, crear un estudio de arte con propósitos de sanación interna, porque nada hacemos con crear sino permitimos que otros también tengan la oportunidad de expresarse.
¿Cuál es tu próximo paso?
Mi próxima exposición está relacionada con el arte conceptual, donde busco darle color a mi vida porque la felicidad es una decisión y decidí serlo hace un buen tiempo. ¡Quiero expresarlo a través del lenguaje plástico!
Por último, ¿qué mensaje les das a todas las personas que tienen ilusiones y aun no las hacen realidad?
A ustedes les digo: Luchen siempre por hacer lo que más les gusta, apasiona y aman porque allí radica la felicidad, sin importar si a “fulano o perencejo” le parece bien o mal. Total la vida es una sola y por algo están es esta dimensión. Así que disfrútenla y cuando les digan “de ilusiones no se vive” no pierdan el tiempo contestándoles. Tengan en cuenta la disciplina, la dedicación, el trabajo, el compromiso y sobre todo,¡la fe en Dios que todo lo puede!
Información: Facebook: YelkimRodriguez
“¡Lugeo, es un nombre que proviene de mis ilusiones desde niño, por convertirme en un gran artista y ser reconocido a nivel mundial.”