Me costó convencer a muchos de ir a votar el 15 de octubre en las elecciones de gobernadores. Yo estaba claro que votaría, aunque las condiciones no eran las óptimas ni el candidato de mi total agrado. Voté y convencí a unos cuantos para que se acercaran a votar. Hubo muchos llamados a votar. Algún efecto tuvieron y la participación final subió, aunque no fue la ideal. En esta oportunidad de las elecciones a alcaldes, resulta más difícil llamar a votar. Lo local, que debería tener la mayor prioridad e importancia entre los electores, no ha despertado el entusiasmo de una elección nacional. El gobierno se está saliendo con la suya y ha desestimulado a los sectores democráticos, que somos mayoría, a ir a votar. Nadie confía en el CNE y el gobierno ha dividido a los demócratas. No dudo en calificar al régimen de astuto, como las víboras, como las ratas. No tiene escrúpulos de ninguna naturaleza, el objetivo es el poder por el poder mismo y poco le importa la Constitución Nacional, las leyes, las formalidades, el buen nombre del país, el respeto al adversario y menos la gallardía y el talante democrático.
En este contexto, el desencanto es mayúsculo. Casi imposible convencer a alguien de ir a votar el 10-12. Es más, me da pena pedirle a alguien que vaya a votar. Por supuesto esto favorece al régimen, y lo más preocupante es que a las grandes mayorías, aun siendo contrarias al régimen, no les importa que gane, total que hagan lo que quieran, me han dicho muchos. Muy triste, muy grave esa actitud. A eso se suma el desprestigio que el gobierno se empeña endilgarle a la oposición. Está muerta la capacidad de lucha por el país? Nos rendimos? No, no caigamos en esa terrible enfermedad que es el abatimiento, aunque se debe pensar en nuevas formas de lucha que irán apareciendo. Con el actual CNE, con el actual TSJ y con el Fiscal usurpador, no hay o no se ve una salida electoral. Cómo votar este 10-12, sí ya sé que el alcalde opositor que gane en cualquier lugar del país, deberá ir a una ANC inexistente, inconstitucional, espuria, a juramentarse o perderá lo que ganó en buena lid como ocurrió en el Zulia.
Es luchar para ganar y luego perder lo ganado. Pero recuerdo también que, tratando de explicar las constantes violaciones del régimen a la Constitución Nacional, me he topado con esa fraudulenta ANC. Entonces mal podría votar para que el alcalde que sea electo con mi voto vaya a juramentarse ante esa ANC inexistente. Eso no sería coherente y es lo que ha desanimado a nuestro electorado. Alguien me decía que el candidato ganador se escondería para no salir en las fotos, por Dios, no se trata de una foto, se trata de ser leal a mi conciencia y a mis principios. No votaré el 10-12, salvo que cambiaran radicalmente las circunstancias.