Yoanner Negrín se lució con un destacado trabajo de seis entradas en blanco, mientras que Henry Urrutia sacudió un jonrón con las bases llenas y Rangel Ravelo agregó otro estacazo de vuelta entera, en su caso solitario, y así los cubanos hicieron suyo todo el protagonismo en el abultado triunfo 8-2 de los Cardenales de Lara (12-15) frente a los Tiburones de La Guaira (11-16), en el estadio Antonio Herrera Gutiérrez de Barquisimeto, al cerrarse la quinta semana de acción de la ronda regular.
Negrín lanzó primores para apuntarse su segunda conquista de la campaña y dejar su récord en 2 y 2 ante un ataque litoralense que a duras penas le conectó cinco imparables en seis entradas de labor. Punto clave en su desempeño es que apenas regaló un pasaporte y tuvo el control de la escena durante las pocas veces que el club visitante colocó corredores en circulación.
El antillano, un pitcher de repertorio amplio, con más maña que fuerza, solo tuvo en Isaías Tejeda un enemigo de peligro, porque le sacudió par de dobletes en las tres veces que lo enfrentó, pero al resto de los toleteros guaireños los mantuvo a raya, propinando hasta cuatro ponches en su sobresaliente línea. Negrín le ganó el duelo al también lanzador derecho Thomas Collier, quien toleró seis de las ocho carreras de los pajaros rojos para cargar con el revés, su tercero del torneo (1-3).
Además de Negrín, por Lara también trabajaron Jesús Sánchez, el dominicano Ricardo Gómez y el estadounidense Ryan Kelly, este último para sacar el noveno, pese a que el desafío no presentaba situación de salvado.
Urrutia, con su grand slam, se llevó todo los “flashes” en ofensiva, pero también fue preponderante el inesperado aporte de Jecksson Flores, un novicio pelotero que recibió la oportunidad de jugar como titular en la antesala y respondió con un triple –su primer hit en el profesional- par de sencillos, más una empujada y otra fletada.
El ataque crepuscular, en una de sus mejores faenas de la temporada, terminó con 13 indiscutibles, ello pese a la ausencia en el line up de los estelares Jesús Montero y Carlos Rivero, quienes estuvieron de descanso en la jornada dominical y familiar en el parque de La Rotaria.
La tropa de José Moreno marcó sus dos primeras anotaciones en la parte baja del segundo episodio, la primera con un sencillo de Juniel Querecuto que encontró en la intermedia a Chuck Taylor, después de un doblete, y la segunda mediante el tribey de Flores que hizo anotar desde la inicial al propio Querecuto.
En el quinto episodio llegó el batazo colosal del partido, cortesía de Urrutia, quien le enganchó un lanzamiento a Collier para mandar la pelota a las gradas por segundo duelo consecutivo y fletar a los tres corredores que estaban en las almohadillas: Flores, Elvos Escobar y Rangel Ravelo. A esa altura, Lara ganaba 6-0 y le daba respaldo a un Negrín que lucía sólido en su desempeño.
Finalmente, la Guaira rompió el blanqueo con una anotación en la apertura del séptimo capítulo, anotada por Teodoro Martínez, ya con Negrín fuera de la lomita porque había cumplido su tarea del día, pero Lara replicó con un par en la baja de ese episodio, producto del jonrón de Ravelo y un doble de Taylor que fletó desde el primer cojín a Urrutia, con lo cual aplacó cualquier intención de remontada, al poner el desafío 8-1.
Para el noveno inning llegó al montículo el estelar taponero Ryan Kelly, a quien le hicieron una, pero se reacomodó para sacar los tres outs y decretar el importante triunfo cardenalero.